Caracas.- Un jonrón de tres carreras en la quinta entrada de Juan De Peña marcó la diferencia para el triunfo de República Dominicana 12-10 sobre Venezuela, convirtiéndose en el primer campeón de la historia de la Serie del Caribe Kids, con el Estadio Juan Demóstenes Arosemena de Ciudad de Panamá como escenario.

El decisivo vuelacerca frente a Rommel Medina inclinó la balanza en un duelo de alternativas. Hasta en cuatro ocasiones la pizarra cambió de dominador, siendo los quisqueyanos, máximos dominadores del Clásico Regional de mayores, con 22 coronas, quienes inauguraron la cuenta global en la de niños entre los 12 y 13 años de edad.

De Peña (2-0), elegido como el Jugador Más Valioso del torneo, resultó el pitcher ganador, con un relevo de 2.0 innings, a pesar de recibir seis hits y admitir tres rayitas libres de suciedad. En todo momento, contó con el apoyo ofensivo de sus compañeros, quienes fabricaron anotaciones en cada uno de los cinco capítulos que tuvieron oportunidad de realizar viajes al plato.

Nueve imparables, entre ellos dos cuadrangulares, incluido otro también con un par corredores en circulación de Gustavo Talmare (líder del departamento en el certamen, con cinco) contra José Ignacio Pérez, en el cuarto episodio, necesitó la delegación dominicana para vencer a los venezolanos, quienes dieron la campanada en la semifinal al superar a la favorita México.

Ángel David García ascendió a la loma en situación de apremio en el sexto y último tramo. Ya con dos outs, pero la carrera del empate en circulación, ingresó en lugar de Milfree Figueroa y obligó a Braulio Urbina a batear un manso rodado hacia las paradas cortas, que desató la celebración en el parque canalero, acreditándose el rescate.

La derrota recayó en José Pérez (1-1), tras admitir cinco anotaciones -todas libres de suciedad- y cuatro incogibles, con tres boletos otorgados en 2.0 actos.

El trofeo de campeón fue entregado por Tony Flores, presidente de la Liga de Beisbol Profesional Roberto Clemente de Puerto Rico, al gerente del equipo dominicano Pavel Aguiló y al mánager Anderson Hernández.

Tras perder su primer careo de la justa, República Dominicana ganó sus últimos seis, para reclamar su trono como el rey caribeño.

Por Venezuela, Juan Andrés Guerrero se quedó con el título de bateo y José Pérez, pese a su descalabro, fue electo como el mejor lanzador del certamen.