Créditos Imagen: Omar López Fotos: A. van Schermbeek
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- A Omar López le entusiasma tomar las riendas de la más reciente versión de Caribes de Caribes de Anzoátegui, que extendió a 12 sus clasificaciones consecutivas y disputó su tercera final al hilo. El reputado técnico de los Astros de Houston en las Grandes Ligas, fue anunciado oficialmente el martes como el mánager de los indígenas para la campaña 2022-2023 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.
“Me llama la atención de este Caribes -y por eso llegué a un acuerdo con (el gerente general) Samuel Moscatel- que en los últimos años se ha hecho una renovación, a través de cambios y de peloteros propios, entre los cuales se destacan varios jóvenes, tanto lanzadores como jugadores de posición”, señaló López a la LVBP.com. “Están Diego Castillo y Oswaldo Cabrera (que todavía no debutan en la LVBP), así como Kevin Vicuña y Andruw Monasterio. Muchachitos como Eduardo Díaz, brazos jóvenes como Harold Chirino, Luis Ramírez, otros que lamentablemente no tienen contrato en MLB como Ángel Guillén, Iván Medina, Cristhian Pedroza, pero que han rendido”.
López, de 45 años de edad, también tendrá a su disposición a buena parte del núcleo de jugadores que le ayudó durante su exitosa gestión de un lustro (2014-2015/2018-2019), entre ellos Oswaldo Arcia, Willians Astudillo, Balbino Fuenmayor, Rafael Ortega, Luis Sardiñas, Tomás Telis, Niuman Romero, Liarvis Breto, Mayckol Guaipe, Jean Toledo y Mauricio Llovera.
“Hay una combinación de juventud con experiencia. Fue parte de lo que hablé con Samuel para estar en la misma página, pues hay que empezar creer y apostar a la juventud, junto con la experiencia para crear la nueva generación Caribes de Anzoátegui. No estamos hablando de reestructuración, de hacer caída y mesa limpia, pero tenemos que estar conscientes de lo difícil que es llenar o fortalecer tus necesidades en Venezuela. Así que con lo que tenemos, hay que darle paso a los que vienen detrás. Esa fue mi bandera para regresar con Caribes, una vez que mis conversaciones con otros equipos (al menos dos) no fueron fructíferas”.
Durante sus días como capataz, en su primera etapa, la Tribu sumó 151 victorias por 124 derrotas en 275 juegos, para un promedio de .549, con dos títulos en dos finales (2014-2015 y 2017-2018). Desde entonces, Anzoátegui no ha bajado el ritmo, como lo indica su balance de 71-60 (.542) en la ronda eliminatoria, en tanto que acumula un cetro (2020-2021) y dos subcampeonatos.
“Mis expectativas son que todos los departamentos, la gerencia, peloteros, clubhouse, volvamos a trabajar como en la época en la que estuve durante cinco años: en la misma página”, enfatizó López. “Espero que los muchachos puedan respondernos, no nada más a mí o al cuerpo técnico, sino al público en general y a la fanaticada del club, con su forma de jugar, que tengamos consistencia y asumamos el compromiso de mantener a Caribes donde está, año tras año. Si se obtienen campeonatos, bien, sino seguir siendo exitosos, me refiero a clasificar, tener una buena actuación en el Round Robin y tratar de llegar a lo más anhelado por cualquier equipo, que es la final y un campeonato. No es fácil, hay que construirlo poco a poco. Esas son mis expectativas y que también se pueda entender, que la vida tiene ciclos, momentos y en ocasiones hay que asumir los sacrificios, las decisiones que deben tomarse. Eso es a lo que aspiro en general”.
MAYOR EXPERIENCIA
Omar López se alista para su temporada 24 en la organización de los Astros de Houston y la número tres como parte del staff de Grandes Ligas, desde que en 2019 fue designado coach de primera base de los siderales. Esa pasantía arriba ha enriquecido sus conocimientos sobre el juego, que aspira a aplicar con Caribes.
“De acuerdo con mi experiencia, lo que he aprendido con los Astros en los últimos años es a agrupar los lanzadores, de acuerdo con sus características. Es decir, cómo poder crear pelotones según su repertorio para llevar el juego”, apuntó López, que en 2021 sustituyó en tercera al coach Gary Pettis, quien debió a alejarse de Houston debido a problemas de salud.
“Aquí en Grandes Ligas, agrupan a los pitchers de acuerdo con las métricas, con la data, la tecnología, que es la que se encarga de leer y evaluar el repertorio de cada lanzador y para qué tipo de equipos o alineaciones aplica ese determinado tipo de lanzadores, lo que te da un alto porcentaje de tener éxito”, abundó el estratega. “Allá (Venezuela) es un poco más compleja la situación (por no tener acceso a ese tipo de estadísticas), pero entonces usas la vista, el ojo, contra los equipos a los que te vayas a enfrentar”.
López se adaptará, como lo hizo antes con Caribes y a lo largo de sus 12 años como piloto en las granjas de Houston.
“Mi juego y cómo lo desarrolle, dependerá del equipo que se estructure. El club que tuve fue ofensivo, en el que no podías hacer mucho, porque cualquiera te podía dar un batazo, el juego pequeño se veía disminuido. Así que tengo que ver qué tendré disponible, en especial el pitcheo, debo que conocerlo muy bien”.
Omar López regresa con Caribes, luego de formar parte del cuerpo técnico de Houston en las Mayores desde 2019
COLABORADORES DE CONFIANZA
Durante la ausencia de Omar López, la gerencia Caribes designó a Ramón Borrego para ocupar el banquillo en la 2019-2020, pero el extrañamiento del que fue objeto la LVBP por Major League Baseball, evitó que el técnico de los Mellizos de Minnesota asumiera el cargo. En su lugar, las oficinas orientales colocaron a Jackson Melián, que luego de llevar a la final a la Tribu, fue despedido a mitad de la siguiente campaña.
Mike Álvarez, coach de pitcheo de los indígenas por más de una década, dio un paso al frente, ganó el título y a finales del mes de enero, llevó a Caribes a disputar la final, que perdió en siete disputados desafíos contra Magallanes. Más exitoso no pudo ser, pero un día antes de conocerse el regreso de Omar López, el veterano instructor declaró que estaba de acuerdo en volver a sus anteriores funciones y cederle el mando al valenciano.
“La gerencia habló conmigo y expresó el interés de traer a otro mánager, pero que yo continuara como coach de pitcheo y les dije que sí, solo falta llegar al mutuo acuerdo”, le comentó el cubano a la cuenta de Instagram LVBP en la Jugada.
“Esa fue la razón principal por la que me sentí cómodo cuando acepté la oferta de Caribes”, reveló López. “Quería que Mike entendiera y estuviera de acuerdo, pero de verdad, sinceramente, que no se sintiera mal o incómodo. Tuvimos varias conversaciones y yo tenía la necesidad de sentir que Mike estuviera bien, para que no existieran fricciones”.
“Que él haya salido a declarar sobre su situación, no fue un pedimento mío, sino que salió de él. Entonces los tiempos se dieron perfectos. Estaba de acuerdo y cuando hablé con él, lo sentí de esa manera”, agregó López. “Eso fue clave, porque no quería faltarle el respeto, pues nadie está por encima de nadie. Obviamente, tenerlo de regreso con esa tranquilidad emocional, me ofrece serenidad para seguir trabajando. Tenerlo a mi lado es una ayuda muy grande”.
Mike Álvarez volverá a su rol de coach de pitcheo, que ha desempeñado a lo largo de su exitosa carrera
Álvarez fue un colaborador fundamental para López, al igual que el marabino Rouglas Odor, quien regresa como coach de banca.
“Rouglas es mi hermano y ahora tiene más experiencia porque dirigió (al Zulia), algo que me da un plus, es muy valioso tenerlo. Es muy importante saber cómo debemos trabajar en conjunto, con Mike y Rouglas”.