Créditos Imagen: Luis Torrens | | Fotos: Alejandro Van Schermbeek
Andrés Espinoza Anchieta | Prensa LVBP
Caracas.- Cuando la embarcación magallanera naufragó en diciembre, Luis Torrens cayó a un agua infestada de Tiburones. Para la inmensa mayoría puede sonar como una verdadera pesadilla, digna de cualquier película de terror, pero la realidad es que, en este caso, eso era justo lo que el grandeliga estaba esperando.
La Guaira tomó a Torrens como su refuerzo en el pasado Draft de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, que tuvo lugar el 31 de diciembre, a sólo dos días del comienzo del todos contra todos.
El equipo de Oswaldo Guillén está repleto de figuras a lo largo de su alineación, pero la receptoría ha generado una gran cantidad de dudas en todo el torneo, pues piezas como Francisco Arcia y José Briceño no han tenido los mejores desempeños posibles, así como tampoco Sebastián Rivero, quien además salió del roster para el Round Robin, mientras resuelve algunos inconvenientes con sus papeles.
“Me dieron bastante confianza desde el momento en el que llegué al equipo”, le comentó Torrens a Venevisión después de la primera victoria de los escualos en la instancia, el pasado martes contra Cardenales en Barquisimeto. “Siempre estuve activo por si llegaba esta oportunidad y gracias a Dios sí llegó”.
No había ninguna garantía de que así fuera. La temporada del valenciano con los Navegantes estaba lejos de ser deslumbrante, como aquellas que captan la atención de cualquier equipo de inmediato.
Sin embargo, la ausencia de Rivero, que estará fuera de acción por lo menos durante la primera mitad del todos contra todos, según informó el gerente general de los salados, Alberto Díaz, junto con el bajo rendimiento general que han tenido los caretas litoralenses en esta campaña, fueron toda la motivación que necesitaba el combinado para apostar por los servicios de un veterano con seis años de experiencia en las Grandes Ligas.
En 38 desafíos de la ronda regular con los navieros, el máscara registró una respetable línea ofensiva de .273/.342/.378, junto con seis dobles, tres jonrones y 15 carreras remolcadas. Pero la verdadera respuesta ofensiva de Torrens llegó hacia la recta final de la contienda, cuando finalmente logró sentirse cómodo en el plato.
“Al final de la temporada me fui sintiendo mejor, recuperé la confianza y tomé mejores turnos”, explicó. “Ahora tenemos que aprovechar que empezamos este 2024 con el pie derecho y hay que tratar de seguir con ese ritmo", agregó.
La poca profundidad en la receptoría de La Guaira, obligó a la llegada de Luis Torrens
En efecto, ha sido el comienzo de año que Torrens esperaba tener después de que su objetivo de seguir en la pelea con el Magallanes se hundiera en una decepcionante zafra para el club con sede en Valencia.
En su primer desafío con los Tiburones, el paleador se fue de 4-2 con un triple y dos carreras remolcadas para comandar el lauro salado, mientras que, en la siguiente faena, también contra Lara en el Antonio Herrera Gutiérrez, volvió a tomar la batuta de la temible ofensiva de su equipo al finalizar de nuevo de 4-2, pero esta vez con cuadrangular y un trío de fletadas.
Si bien la parte ofensiva siempre es importante, lo que más estaba buscando el alto mando de La Guaira con la selección de Torrens era una pieza que, con sus credenciales, pudiera liderar a los lanzadores del conjunto, que no siempre han mostrado su mejor versión en la 2023-2024.
En la inauguración del Round Robin, el carabobeño dejó claro que era el hombre indicado para la tarea, guiando a Ricardo Pinto a una sólida apertura de cinco innings, en los que apenas toleró una carrera limpia y ponchó a un quinteto de rivales.
“Apenas llegué al equipo traté de preguntarle bastante a los otros receptores, como Francisco y Briceño, cómo lo trabajaron ellos durante la temporada”, reveló Torrens. “Y luego hablé con el propio Ricardo, que al final me hizo el trabajo fácil en el juego, porque se dejó llevar y salieron los resultados como queríamos”, sentenció.
El dato
Luis Torrens viene de una temporada en la que vio poca acción en la gran carpa, pues solo disputó 18 desafíos entre los Cachorros de Chicago y los Marineros de Seattle. Esa cantidad de cotejos es la menor para el venezolano en una misma contienda en el mejor beisbol del mundo desde que jugó siete con los Padres de San Diego en 2019, apenas su segundo año en el máximo nivel.
Luis Torrens ha respondido con el madero y ha sido clave para los Tiburones