Créditos Imagen: Ranger Suárez Foto: Al Bello
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Ranger Suárez se convirtió en una buena historia desde su firma como profesional hasta su arribo a las Grandes Ligas y el martes por la noche protagonizó otro hecho digno de ser destacado por cronistas. El zurdo completó cinco entradas en blanco para llevarse el triunfo de los Filis de Filadelfia 7-0 contra los Astros de Houston, en el tercer juego de la Serie Mundial, que inclinó la balanza del lado de los cuáqueros 2-1, en el choque al mejor de siete compromisos.
Suárez -que ya no es un secreto como lanzador- fue una de las figuras inesperadas, pues en principio iba a iniciar el cuarto desafío del Clásico de Otoño, luego de aparecer el viernes como relevista en el desafío uno. Pero el encuentro del lunes fue suspendido por lluvia y el mánager Rob Thomson se encontró en la posición de abrir con el venezolano en lugar de Noah Syndergaard.
Suárez, apoyado por jonrones de Alec Bohm, Bryce Harper, Rhys Hoskins, Brandon Marsh y Kyle Schwarber, responsables de las siete anotaciones del club, respondió y se convirtió apenas en el tercer venezolano que transita al menos cinco entradas sin permitir anotaciones en una Serie Mundial, junto con Lester Straker (6.0 IP, 1987) y Freddy García (7.0 IP, 2005), mientras que solo es el segundo de ese reducido grupo con una victoria en desafíos de ese calibre, al lado de García.
El tirador aisló tres hits y un boleto, mientras abanicaba a cuatro. En tanto que los bateadores entre el primer y quinto turno de Houston, se fueron de 11-0, mientras estuvo en el montículo.
“Ha hecho todo por nosotros y lo ha hecho bien”, dijo el estelar receptor J. T. Realmuto, después del desafío, según MLB.com. “Parece que está jugando un juego de niños”.
Suárez exhibe efectividad de 1.23 (14.2 IP, 2 CL), incluido 1.02 de WHIP, en sus cinco apariciones de postemporada (tres inicios), con récord de 2-0 y un salvado, aunque los Filis han ganado cada uno de los desafíos en los que ha aparecido.
“El sinker funcionó excelente esta noche. Tenía muy buen movimiento. Mi recta cortada y mi cambio también fueron muy buenos. Induje muchos rodados con esos lanzamientos (10)”, destacó Suárez sobre su soberbia presentación. “El aliento de los fanáticos, estuvo excelentes, como siempre. Definitivamente me dieron un plus. Inyectan esa energía que no consigues en ningún otro lado. Durante toda la postemporada, han sido maravillosos”.
Ese apoyo y, en especial la situación del juego, en ocasiones puede atentar contra los nervios, pero no en el caso de Suárez.
“Independientemente de cómo vaya el juego, debes mantener la compostura. Eso me ha ayudado durante todo el año. Siempre me ha ayudado en mi carrera. Así que es algo que hago todo el tiempo”.
Con su actuación se convirtió apenas en el segundo abridor de Filadelfia que consigue una aparición sin encajar rayitas en una Serie Mundial, uniéndose a Curt Schilling (9.0 IP, 5 H), que se apuntó un blanqueo en el quinto juego del Clásico de 1993 contra los Azulejos de Toronto.
Fue la decimotercera apertura en blanco en la historia de los playoffs para los Filis y la cuarta de 2022, detrás de Aaron Nola (Juego 2 de la Serie de Wild Card Series) y Zack Wheeler (en los primeros compromisos de las series de Wild Card y por el Campeonato de la Liga Nacional).
Suárez, de 27 años de edad, has estado en la organización durante 10 años, tras firmar en 2012 por apenas 25.000 dólares de bono.
“Es de un pueblo por allá en Carora (estado Lara). Fue un pitcher que vimos en una academia en Valencia y nuestro scout de zona nos trajo buenos reportes de él. No tiraba duro, pero tenía fluidez cuando soltaba la bola y era muy controlado”, contó Jesús “Chalao” Méndez, coordinador internacional de scouts de Filadelfia, en una conversación con LVBP.com en 2018, cuando el zurdo debutó en las Mayores. “Trabajó muy duro en nuestra academia, una de sus características, con Lester Straker (coach de pitcheo), ganó físico y comenzó a subir las millas de la recta. Su desarrollo ha sido lento, pero ahora está mostrando todo su talento y potencial. La recta la ha tirado consistentemente en las 95 mph y su control es excepcional”.
Bajo la tutela de Straker, vaya casualidad, Suárez apenas cedió un boleto en 80.2 innings en 2014, un récord en la ahora extinta Venezuelan Summer League. El zurdo además ponchó a 78 rivales y su promedio de carreras limpias fue de 1.56 en 14 aperturas. Sin nada que desmostar en ese nivel, viajó a Estados Unidos la siguiente campaña y siguió creciendo como prospecto. Ahora contribuye a los triunfos de Filadelfia en un Clásico de Otoño.
“Sí, desde que firmé con los Filis soñé con llegar a una Serie Mundial, y mírame ahora. Estoy aquí”, sonrió. “No es algo que solo quiero yo, sino toda la ciudad de Filadelfia. Así que estoy muy feliz por ellos también”.
Cuando la Serie Mundial ha estado empatada 1-1, el ganador del Juego 3 alzó los brazos como campeón en el 67,2% de las veces (41 de 61).
Si la confrontación se extiende a siete desafíos, Suárez estaría en el montículo. Nada mal para aquel joven que a los 16 años de edad comenzó a lanzar como profesional y soñaba con estar en una instancia a las que pocos acceden y logran tener éxito.