Créditos Imagen: Fotos: AVS PHOTO REPORT
Eduardo Acosta | Prensa LVBP
Puerto La Cruz.- ¿Qué pasa con Caribes de Anzoátegui? La pregunta ha sido recurrente en los últimos días debido a la mala racha por la que atraviesa el actual campeón de la LVBP.
Ahora mismo, la Tribu se encuentra fuera de la clasificación, algo que nunca sucedió en la temporada anterior, cuando el club oriental clasificó primero a todas las instancias del campeonato.
Dicha situación no deja de llamar la atención, considerando que buena parte de la base del equipo se mantiene intacta. Pero todavía el manager Omar López no enciende las alarmas, por el contrario hace un llamado a la tranquilidad.
“No hay que entrar en pánico, de hecho eso no existe en este equipo. No hay motivo de alarma por lo que nos está sucediendo. Claro, la ofensiva no está como nos gustaría que estuviese y el pitcheo, sobretodo el abridor, ha tenido sus fallas últimamente. Pero todavía estamos en fase de engranaje. Lo bueno es que no estamos lejos de la clasificación y que jugadores como (Oscar) Salazar o (Jeremy) Hazelbaker han avanzado, me siento satisfecho por ello”, dijo López.
Su actual récord (13-14), su ofensiva (.264), la tercera más baja del actual certamen, más los pocos jonrones (9), carreras anotadas (86), la menor cantidad en la liga (3,19 p/p) y 3.71 de promedio de anotaciones limpias de sus iniciadores, son el reflejo de lo que ocurre con Caribes, que para algunos entendidos es favorito para volver a la Gran Final.
La primera mitad de la temporada se decretará el domingo, pero López tampoco se muestra desesperado por la cercanía de la fecha. Considera, que el club no ganaría si se entrega a la ansiedad.
“A pesar de todo lo que nos ha pasado el equipo se mantiene unido. Eso algo que siempre ha caracterizado a esta novena, siempre hablamos y estamos en conjunto. Pero creo que la paciencia es un factor importante. Por ejemplo, he visto en algunas ocasiones a algunos bateadores hacer swing al primer pitcheo y ese no es el plan de trabajo. Ellos deben relajarse. Los contrarios son los que tienen que cometer los errores, nosotros no. Hay que mantenernos positivos. De hecho siempre conservamos esa actitud. Los muchachos han mostrado una nueva cara últimamente, mucha determinación y eso es algo muy positivo para lo que queremos hacer de aquí en adelante”, sostuvo.
A PASAR LA PÄGINA
Mike Álvarez, coach de pitcheo de Anzoátegui, no se hace de la vista gorda con lo que pasa en la novena anzoatiguense. Reconoce, sin ningún tipo de tapujos, que las cosas no han salido del todo bien. Sin embargo, sugiere que a pesar de la mala situación el equipo debe y tiene que salir adelante y no pensar tanto en lo que ocurrió o no en cada partido jugado, ni tampoco quedarse con los resultados de temporadas anteriores.
“Todos hablan de lo que pasó el año pasado. Fue una temporada increíble, de eso no hay duda, pero eso quedó atrás. Hay cosas que no tenemos con relación al año anterior y debemos ajustarnos y jugar con lo que tenemos ahora, solo así conseguiremos más compenetración entre pitcheo, bateo y defensa. No se debe caer en el desespero, pues todavía queda mucho campeonato que recorrer”, mencionó Álvarez, que admitió que el trabajo de los abridores de indígenas no ha sido el esperado.
“Cuando los abridores no te llegan al quinto inning, obviamente la carga para los lanzadores relevistas es mucho mayor, hemos tenido que mover el bullpen todos los días y eso es mucho, de verdad. De nuestra parte solo queda seguir hablándoles y transmitirle confianza, al fin y al cabo ellos son los que salen a responder por el equipo en el terreno de juego. Tienen que estar preparados y, sobretodo, confiados para resolver la situación que se les presente. Espero que la cosa cambie, todavía hay mucha oportunidad de recuperarse”, comentó.