Créditos Imagen: Harold Castro Fotos: AVS PHOTO REPORT
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Harold Castro iniciará la sexta semana del calendario regular como líder bate de la temporada. Una actuación improbable antes del inicio de la eliminatoria, pero que premia el esfuerzo del versátil jugador para mantenerse a diario en la alineación de los Leones del Caracas.
“No lo esperaba”, admitió el novato, a pocos pasos del dugout melenudo en el Estadio Universitario. “Simplemente salgo al terreno con la mentalidad de hacer mi trabajo. Esperando que el manager Alfredo Pedrique me dé la oportunidad y este año se han dado las cosas. Creo que es el resultado del trabajo que he venido haciendo desde que terminé en Estados Unidos (en Ligas Menores con Detroit)”.
Castro, de 22 años de edad, apenas consumió 44 turnos en la 2015-2016, cuando debutó en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, la mayoría de ellos como suplente. Un rol de reparto que se suponía iba desempeñar en la nueva campaña. Pero hilvanó una cadena de 12 encuentros con al menos un imparable, la más larga del club en la zafra, que le convirtió en protagonista y obligó a Pedrique a reescribir los argumentos para armar la trama de su alineación.
“Harold ha venido trabajando muy bien desde la pretemporada. Pasa por un buen momento ofensivo y ha hecho el trabajo como primer bate. Mientras rinda seguirá en el lineup”, afirmó el estratega.
El novato le ha tomado la palabra al piloto. Entre el 31 de octubre y el 6 de noviembre, encabezó el circuito en promedio (.563), OBP (.611) y OPS (1.549), mientras que su slugging se ubicó en .938, en 16 turnos repartidos en cinco encuentros, incluido un partido en el que se fue de 5-5. Estuvo cerca de llevarse la distinción de Jugador de la Semana.
“Siempre quieres lo mejor cuando comienza una temporada y los resultados se están dando. Ahora estoy líder bate de la liga, pero no pienso mucho en eso. Solo me mentalizo para salir al terreno a hacer las cosas, a jugar buena pelota. De eso se trata. Todo se lo debo al trabajo, a la perseverancia”, insistió el joven caraqueño.
Cuando los Tigres de Detroit le dieron 29.000 dólares por su firma en marzo de 2011, Castro apenas pesaba 63,5 kilogramos, pero mostraba velocidad de manos y una habilidad innata de darle con consistencia a la bola con la parte gruesa del bate. Herramienta que siguió desarrollando mientras ascendía en el sistema de granjas de los bengalíes y poco a poco iba fortaleciendo su cuerpo de adolescente. Lo que le convirtió en prospecto de la organización.
Ahora, mucho más maduro, ha mejorado su aproximación en el plato, para aprovechar la capacidad de golpear la bola y llevarla a terreno de nadie.
Harold Castro tuvo una buena pretemporada con el Caracas
“Antes era un poco más impaciente. Hacía swing temprano en la cuenta y veía un solo pitcheo por turno”, explicó. “Ahora, soy un poco más selectivo en el plato. Eso es lo que me pidió Detroit. Es lo que estoy tratando de hacer. He visto mejores pitcheos y he conectado mejor la pelota”.
Las estadísticas lo respaldan. Castro solo ha hecho swing cuatro veces al primer pitcheo y ha bateado 21 veces cuando tiene ventaja en la cuenta, situación en la que exhibe .619 de promedio (21-13). En tanto que abriendo inning su average es de .522 (23-12).
Son apenas 65 turnos en la zafra para Castro, pero ningún otro bateador en el circuito con al menos ese número de veces en el plato exhibe una mejor línea ofensiva que el bisoño jugador de Leones (.446/.457/.600).
“Bueno, solo puedo decir que estoy en un buen momento”, sonrió Castro, que trata de no obnubilarse con sus números. “Cuando comencé la liga, estaba un poco más defensivo, tratando de hacer contacto con la pelota. En este momento tengo más confianza y estoy bateando bastante bien. Creo que esa es la clave. Confianza en el home. Hago swing más duro y la bola está saliendo hacia los pasillos”.
El zurdo cuenta seis dobles y dos triples en sus alforjas. Jesús Guzmán suma también ocho extrabases y casi la mitad de sus 24 encuentros han sido como cuarto en el orden.
“Sí. Tiene mucha confianza en sí mismo”, convino Pedrique. “La entrega, el trabajo diario, si lo haces con respeto y disciplina, hacen diferencia y obtienes resultados. Castro está levantando más la bola, físicamente se ve más fuerte, más maduro y ha estado relajado porque sabe que estará en el lineup”.
Esa ética en sus faenas le ha convertido en un pelotero polivalente. Castro era considerado un atleta y un corredor por encima del promedio, cuando estampó su firma con Detroit, pero su defensa en la segunda base era limitada, lo que de alguna manera le costó su estatus de prospecto en los últimos años. Ahora, ha evolucionado hacia otra dimensión en el terreno.
“Trabajo todos los días en mi guante y en el bateo, así me esté yendo bien. En cuanto al fildeo no paro de esforzarme porque era mi punto débil. Eso no es un secreto. Mi principal herramienta siempre ha sido el bate, así que comencé a practicar en segunda, tercera, primera. Incluso hasta en el center field. No he jugado todavía allí, pero he trabajado mucho en posición por si el manager me necesita”.
“En este momento tengo más confianza
y estoy bateando bastante bien.
Creo que esa es la clave. Confianza en el home.
Hago swing más duro y la bola está saliendo hacia los pasillos”.HAROLD CASTRO
Castro ha aparecido en siete ocasiones en la intermedia, además de la inicial (1), antesala (3), jardín izquierdo (2) y derecho (1).
“Sí. Me considero uility. Puedo hacer mi trabajo en cualquier posición, doy lo mejor de mí donde me pongan”.
Pedrique se frota las manos.
“Es un pelotero clave por su versatilidad. Se puede desenvolver en el outfield sin problemas. Estoy loco por ponerlo en el jardín central, para ver si nos puede ayudar allí, porque en las esquinas no es nada nuevo. Lo más difícil de ese trabajo es la parte mental y Castro tiene el enfoque. Ha hecho un gran trabajo”, precisó el piloto.
Mientras el recluta siga bateando y el estratega del Caracas pueda moverlo por diferentes posiciones, su nombre seguirá apareciendo en el linup.
El sábado de la semana pasada, Wilfredo Tovar, que llegó en un cambio desde Margarita para estabilizar el infield, fue sentado en favor del encendido recluta.
“Considero que todos podemos hacer el trabajo. Estamos preparados para esta liga. A algunos nos está yendo bien ahorita, pero no quiero sentar a nadie. Simplemente el que haga el trabajo tiene que jugar, lo veo de esa manera”, destacó.
Pedrique seguirá fiel a su filosofía. Sin importar nombres.
“¿Quiénes jugaran? Eso me lo irá dictado el día a día, de la manera como se vaya desenvolviendo la temporada y el rendimiento de los peloteros, cada quien en su rol. Por lo difícil del calendario. (Gregorio) Petit, (Dayan) Díaz, (Henry) Rodríguez, van a necesitar descanso y eso me permitirá jugarlos a todos”, puntualizó el mandamás.
Castro está de acuerdo. Entiende lo ocurre. El guión le tiene como protagonista en este instante. Pero el beisbol, en ocasiones, se parece a una banda de jazz. Cada miembro tendrá un momento para destacarse como solista, en una pieza que debe ser vista como la suma de las partes que ejecutan los músicos.
“Por eso somos un equipo. Ahorita se me están dado los resultados y espero que el manager me mantenga en el lineup. Quiero responder a la confianza que me han dado. Mañana puede ser otro”, afirmó.
EL DATO
Harold Castro debutó en la 2015-2016 con el Caracas y consumió 44 turnos, 6 por debajo del mínimo para seguir ostentando la elegibilidad para el premio Novato del Año.
