Valencia.- Yilber Díaz se despide de Caribes de Anzoátegui y de la LVBP, luego de una enriquecedora prueba de ocho semanas en el calendario regular de la temporada 2025-2026.
Díaz entendió, desde las prácticas previas al Día Inaugural, que podía utilizar su pasantía con La Tribu como un enriquecedor proceso mediante el cual adquiriría nuevos conocimientos, cambiaría su perspectiva sobre algunos aspectos del juego y desarrollaría nuevos comportamientos y actitudes como resultado de esa vivencia.
“Fue una experiencia muy bonita”, admite, mientras se toma un descanso del intenso sol valenciano, tras soltar el brazo en terreno del jardín derecho, durante de la serie contra el Magallanes en el Estadio José Bernardo Pérez. “Desde siempre quise estar aquí, porque el sueño de niño de cada pelotero venezolano es jugar en nuestro país y la verdad me sentí súper bien. Agradecido con Caribes por darme la oportunidad”.
En Anzoátegui también le agradecen.
“Su paso por Caribes fue satisfactorio para ambas partes. Él quería lanzar frente a su familia. Lo disfrutó muchísimo”, enfatiza Otto Padrón, gerente deportivo del club. “Sus números hablan de todo lo que aportó al equipo y estamos agradecidos de que a pesar de su estatus y estar en roster de 40, haya venido con esa disposición, después de sostener conversaciones extensas con Arizona, para que le dieran el permiso y se logró”.
Yilber Díaz –que se quedará hasta el 7 de diciembre- marcha con récord de 3-0, con 1.23 de efectividad y 1.09 de WHIP, con seis salvados –segundo detrás de Silvino Bracho- y 14.2 innings, repartidos en 12 encuentros, como cerrador. Con una buena relación de ocho bases por bolas por 21 ponches.
“Al comienzo, relevó temprano en el juego. Pero con sus condiciones y la iniciativa que mostró pudimos ponerlo como cerrador en su segunda aparición con el equipo”, precisa Jesús Hernández, instructor de lanzador de los orientales.
“Era algo que habíamos estudiado –junto con la gerencia y el mánager Asdrúbal Cabrera- porque su permiso era de alrededor de 15.0 innings y podíamos aprovecharlo mejor teniéndolo como cerrador, pues no iba a lanzar todos días y podíamos aguantar o salvar los juegos con él”, agrega Hernández.
La decisión final la tomó Cabrera y desde un principio Díaz se sintió cómodo.
“Pienso que Asdrúbal Cabrera ha sido un excelente mánager, uno de las mejores cosas que tenemos en el equipo. Como está debutando, todavía tiene ese lenguaje cercano a los peloteros, es como uno más y eso facilita la comunicación. Es tener la confianza de un amigo más, de un compañero y eso me gusta”, suelta Díaz, cuyos seis rescates son la mayor cantidad para un apagafuegos de Caribes desde la campaña 2022-2023.
Yilber Díaz ha disfrutado su experiencia en la LVBP
TRANSICIÓN AL BULLPEN
Yilber Díaz comenzó su carrera como abridor, pero durante el verano boreal de 2025 inició su transición definitiva al bullpen, una metamorfosis que ha continuado con éxito en la LVBP.
“El juste ha sido mental. Desde que llegué aquí me dieron la confianza. Los lanzadores necesitamos a un pitching coach que te brinde esa seguridad. Eso fue lo mejor para mí. Al definir mi rol, sabes en qué te vas a enfocar y pienso que tengo el talento para ser cerrador”, afirma el tirador.
Las estadísticas que exhibe hablan que el cambio le ha asentado bien, pero debió enfrentar momentos difíciles.
Actuó en 35 encuentros, ocho como iniciador, entre las categorías de novatos y Triple A de Arizona, con balance de 1-3 y un promedio de 10.26 anotaciones limpias. En 57.0 innings abanicó a 70, pero entregó 73 boletos, algo inédito en su carrera.
“La transición de abridor a relevista me afectó. La preparación es totalmente diferente. Como iniciador tienes casi una semana para alistarte entre salidas, con un bullpen en el medio. Sabes a cuál equipo te vas a enfrentar con mucha antelación”, explica. “En cambio, que como relevista estás allí sentado todos los días, esperando que llegue la llamada para levantarte a calentar y estar listo lo más rápido posible para una situación de apremio. Se trata de minutos”.
Yilber Díaz ha lucido dominante en su papel de cerrador de Caribes
Al final de la zafra con Arizona, pudo encontrar el ritmo. En sus últimas 10 salidas con el Amarillo (Doble A), del 23 de agosto al 18 de septiembre, mostró minúscula efectividad de 0.84 y 0.78 de WHIP. En 10.2 entradas pasó por las armas a 15 y cedió apenas un par de boletos, mientras que sus rivales le ligaron .162 de promedio (37-6), con apenas un extrabase (doble).
“Traje lo mismo con lo que terminé en Estados Unidos, tras comenzar mal. Logré toda la intensidad necesaria para cerrar juegos”.
Díaz, de 25 años de edad, cuenta en su repertorio con una poderosa four seamer, slider y curva de nudillos. En su trayectoria y especialmente durante su debut en las Grandes Ligas en 2024 y su única aparición arriba con los D-backs en 2025, su recta osciló entre las 94 y 96 mph, según Baseball Savant. Pero con Caribes se ha ubicado en el rango de las 97-98, de manera consistente, tocando con frecuencia las 99 mph, algo que lo había logrado de manera ocasional en Ligas Menores.
“No tengo que dosificarme en una salida corta”, arguye. “Obviamente, mi principal arma para sacar outs es la recta”.
Ese envío rápido ha sido devastador, cuando los combina con sus envíos quebrados.
EL SINKER COMO ALTERNATIVA
Yilber Díaz aspira a agregar un envío más a su efectivo repertorio. Se trata de un sinker.
“Tenemos un par de semanas trabajando en ese envío”, revela Jesús Hernández. “Pues la bola tiene un movimiento natural hacia el lado del brazo. El ajuste que hizo con ese pitcheo fue increíble. Las condiciones que tiene Yilber para aprender es algo que no veía en un lanzador desde hacía bastante tiempo. Puede hacer los ajustes en el momento”.
El sinker se caracteriza por su movimiento hacia abajo y lateral. Es un lanzamiento que busca provocar un rodado.
“Si es contra derechos, la bola se mueve del medio a la parte baja del home plate. Es efectivo para generar contactos débiles y le aumentaría el porcentaje de rollings”, esclarece Hernández. “Contra zurdos también es efectivo. Pero mayormente para derechos cuando tenga situación de hombres en base, para obligarlos a batear roletazos. Sería un pitcheo muy efectivo para él, por su velocidad y la acción del brazo”.
Yilber Díaz trabaja en agregar un nuevo envío a su arsenal sobre el montículo
Díaz lo todavía no lo ha puesto en práctica, pero será una buena adición en su arsenal cuando logre dominar el envío.
“Sigo trabajando en ese pitcheo. Jesús me está ayudando mucho, me está dando los consejos necesarios para utilizar el sinker con efectividad y está funcionando. Todavía en juego no lo he querido lanzar porque no tengo la suficiente seguridad. Pero pienso llevarlo a los Entrenamientos de Primavera para seguir puliéndolo, mientras trato de ganarme un puesto en el bullpen de Arizona”.
CONDICIONES PARA TRIUNFAR
Jesús Hernández exlanzador dominante en la LVBP y curtido entrenador de brazos, augura éxito al nuevo relevista, al tiempo que reconoce su esfuerzo.
“Yilber es un caso especial. Nos sentimos muy orgullosos de tenerlo con nosotros. Es muy importante contar con un brazo de esa calidad en la liga”, precisa.
“El único ajuste que hicimos fue mental. Le ayudamos a entender el nivel de presión que significa lanzar en Venezuela y de controlar las emociones cuando entra en un noveno inning, pues debe enfrentar a bateadores de diferentes niveles, así como nombres que en esta liga pesan mucho. Eso fue, básicamente, en lo que trabajamos con él”, glosa el técnico.
“Es un lanzador que puede ser usado en diferentes roles, relevo intermedio y cerrador. Pero pienso que su futuro está en terminar los juegos. Posee las condiciones físicas y el repertorio para triunfar en Venezuela y en las Grandes Ligas”.
Jesús Hernández asumió la mentoría de Yilber Díaz
UNA GRAN EXPERIENCIA
El Yilber Díaz que llegó a la LVBP es un lanzador diferente al que saldrá, después de debutar con Caribes.
“Pienso que venir aquí me fortalece, porque debes competir y ganar todos los días. Es algo que me llevo para Estados Unidos… Ahora como relevista pienso que no he podido tener una mejor experiencia”.
No es la primera vez que tiene frente a sí un reto. Antes superó enormes vicisitudes. A los 18 años, aún no había firmado con ningún club de las Grandes Ligas y sufrió una fractura de muñeca, lo que lo impulsó a dejar el beisbol. Para más tarde retomarlo.
“Esa experiencia de vida es muy bonita, es una historia que ha interesado a muchas personas y muchos me siguen por eso. Tengo una mentalidad fuerte”.
Yilber Díaz es un triunfador dentro y fuera del terreno
EL DATO
Por alguna razón, Magallanes se convirtió en Némesis deYilber Díaz. En 4.0 innings contra los Navegantes, el meteórico derecho encajó dos jonrones (de Eliezer Alfonzo Jr. y Leandro Pineda), los únicos que ha permitido, mientras que su efectividad es de 4.50 en dos relevos. En ambos encuentros se apuntó blown saves, pero terminó siendo el ganador (2-0).
