Caracas.- Puede que el infielder Jorbit Vivas sea el último grandeliga en ejercicio que se deje ver con Tigres de Aragua en la temporada 2025-2026 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. Con Leonardo Rivas, Omar Narváez y Ezequiel Tovar descartados y un Eduard Bazardo casi inaccesible por su luminoso desempeño con Marineros de Seattle, el bateador zurdo de 24 años de edad luce como el cierre de caja para los bengalíes en cuanto a su caudal de bigleaguers.
Fue su visado del Big Show un factor influyente en el interés de los rayados por llevarlo a Maracay como parte del sonado trueque del 21 de julio de 2025, a merced del cual Vivas, el jardinero Alberth Martínez, así como los pitchers Aldry Acosta, Carlos Betancourt y Gregory Infante recalaron en Maracay a cambio de los lanzadores Yonny Chirinos, Jean Cabrera, Jorgan Cavanerio, Luis Ávila y el infielder Jhonny Level
“Necesitábamos fortalecer el infield y nos atrajo Vivas por ser un defensor del cuadro joven, grandeliga y capaz de cubrir segunda y tercera”, explica Víctor Gárate, gerente deportivo de los felinos, el motivo por el cual buscaron al carabobeño. “También es importante porque le brinda apoyo a nuestro shortstop principal, Keyber Rodríguez”, abunda Russell Vásquez, coach de banca y lugarteniente de Oswaldo Guillén en el pelotón central. “No lo conozco mucho porque recién se incorporó, pero se le nota muy centrado, serio en su trabajo”.
Vivas se declara honrado por el aprecio de los Tigres. “Este es un equipo competitivo y está de primero. Espero sigamos así”, expresa el jugador venido de Puerto Cabello, fuente inagotable de peloteros profesionales. “Tenemos de mánager a Oswaldo Guillén, para quien todos somos prioritarios. Me contenta jugar para un ganador de Serie Mundial. Con él podemos ganar este campeonato. Y buen tipo”.
Pasaron siete años desde su firma con los Dodgers de Los Ángeles siendo adolescente hasta su elevación a la Gran Carpa con los Yanquis de Nueva York, la divisa más victoriosa del beisbol y también la más afamada. Ese instante de saberse bigleaguer por vez primera es recuerdo imperecedero. Jorbit Vivas lo mantiene fresco dentro de su archivo personal.
“Yo estaba en Triple A y andábamos de gira”, refiere Vivas. “Terminó el juego y yo me iba a bañar para luego trasladarme al hotel cuando el mánager Shelley Duncan me llamó. Era como extraña la cosa. Dijo: ‘¡Hey!, prepárate porque vas a Grandes Ligas’. Ahí llamé a mi mamá y toda mi familia. Lo primero que hice al llegar a los Yanquis fue saludar al mánager Aaron Boone. Ahí estaba Aaron Judge, los venezolanos Oswaldo Cabrera y Oswald Peraza y mi amigo Jasson Domínguez. Todos me felicitaron. ¡Imagínate! ¡Los Yanquis! Al debutar me sentía nervioso, pero al coger el primer pitcheo se me pasó todo”.

Jorbit Vivas trata de utilizar su pasantía con Aragua como una suerte de taller en su formación como pelotero
YANQUIS HASTA EN EL VESTIR
Dicen que un jugador de los Yanquis debe comportarse como yanqui, vestirse como yanqui y hasta dejar propina como yanqui, así no le paguen como yanqui. Jorbit Vivas compartió la experiencia de portar las célebres y centenarias rayas. “No es fácil jugar con los Yanquis, representar a los Yanquis”, considera. “Exige no solo jugar bien, sino ser educado con todas las personas y andar siempre impecable. Hay días en los cuales llevas traje. Siempre debes ir formal. Nada de shorts, ni eso”.
Grandeliga y todo, Jorbit Vivas viene a la LVBP con disposición a aprender, “como novato que soy”, acota. “Aquí hay muchos peloteros buenos con los cuales mejorar, como Cafecito Martínez, Eduardo Escobar. Mi plan es aportar al equipo y ellos pueden ayudarme a mejorar como bateador y defensor de varias posiciones del infield. Para eso estoy aquí”.

Yorbit Vivas llegó a los Yanquis de Nueva vía cambio de los Dodgers de Los Ángeles, el 11 de diciembre de 2023



