Créditos Imagen: Eduardo Díaz Foto: Prensa Caribes
Rayner Rico | Prensa LVBP
Caracas.- A Rouglas Odor, actual mánager interino de Caribes de Anzoátegui, no le fue para nada difícil la adaptación en su regreso a la organización, tras un par de temporadas alejado. Conoce muy bien al núcleo de jugadores que conforman la plantilla aborigen, que poco ha mutado durante sus últimas campañas.
Tampoco le costó mucho tiempo darse cuenta que, entre los rostros con los que todavía no había trabajado, había uno en específico con el que sabía podía contar desde el inicio en sus labores de interinato y ese era el del joven Eduardo Díaz.
“Tengo muy poco conociéndolo. Lo vengo observando desde los entrenamientos y mi primera impresión hacia él ha sido grande”, dijo el por ahora mandamás del equipo, antes de ponderar lo que cree son las cualidades con las que cuenta el toletero, de 25 años de edad. “Velocidad, fuerza, buen fildeo, brazo por encima de average, de verdad que bastante impresionante lo que es capaz de hacer”, dijo.
Tanto deslumbró Díaz en las prácticas previas a la temporada 2022-2023 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), que se hizo de un lugar en el lineup titular de la escuadra anzoatiguense, con todo y lo difícil que podría resultar para cualquier novicio, considerando que dentro del clubhouse existen compañeros con mayor recorrido y de experiencia comprobada en Venezuela.
Y esa confianza la ha pagado con creces. El oriundo de la población de Valle La Pascua en el estado Guárico, inició con todo el campeonato, después de batear para .267, con 9.53 de OPS, en sus primeros cuatro desafíos. Incluso consiguió su primer cuadrangular en el torneo local.
“Para mí fue un momento muy emocionante, sobre todo porque fue en mí primer turno del juego. Desde el año pasado que debuté, quería tener ese privilegio, aunque no pude por el tema de las lesiones, pero aquí estoy sano para demostrar lo capaz que soy de hacer”, recordó Díaz de ese domingo 23 de octubre, inolvidable para él.
Eduardo Díaz dejó una buena impresión, tras estrenarse en la 2021-2022 y ligar para .341/.400/.488 en 41 turnos
Absorbente como una esponja
Si bien el jardinero cuenta con 25 calendarios de vida, aún es considerado un novato para el circuito, por su poca experiencia previa. Algo que esperar superar con la oportunidad que se le está brindando en el terreno y lo que significa tener como mentores a varios jugadores curtidos, incluso en las lides de las Grandes Ligas.
“Uno todos los días aprende algo sobre sus habilidades, sobre la defensa y la manera de ser en el terreno, todo eso uno lo toma. A Niuman Romero, Asdrúbal Cabrera, Balbino Fuenmayor, a todos se les ve ese liderazgo y le brindan a uno, una mejor noción del juego. Para mí es muy importante estar al lado de ellos”, exclamó.
Todas esas enseñanzas van sumando a la carrera profesional de un Eduardo Díaz que ha tenido un camino, si se quiere un poco cuesta arriba, con seis años en Ligas Menores en la que su desarrollo ha sido paulatino. Apenas en 2022 pudo establecerse en la categoría Doble A de los Cascabeles de Arizona.
Aunque lejos de desanimarse, todos los obstáculos encontrados lo han llevado a trabajar más fuerte, a realizar ajustes pertinentes para cuando menos ir a por el sueño de ser un bigleaguer y establecerse como un jugador regular en los parques de la LVBP.
“Ya he visto mucho beisbol. Puedo decir que todas esas experiencias me han brindado la oportunidad de convertirme en un mejor pelotero. También la disciplina y la constancia cada día. Dándolo todo desde las prácticas. Salir a jugar fuerte en los partidos. Todo eso son cosas buenas que lo ayudan a uno a mejorar, a lograr la madurez necesaria para continuar luchando por lo que tanto se quiere”, explicó.
De por vida, en partes de dos campañas su OPS es de .905 y promedia 11,2 carreras creadas
Eduardo Díaz no siente más que agradecimientos a toda la directiva de Caribes por el chance que se le está concediendo, así como también al cuerpo técnico liderado actualmente por Odor, quien lo vislumbra como su primer bate y patrullero central, por lo menos en esta primera mitad de campaña.
“Para mí es muy satisfactorio que el club me siga tomando en cuenta. Odor me ha ayudado bastante. Siempre se pone conmigo en los early works (trabajo temprano) a practicar mi swing. Lo bueno es que me da confianza de jugar como yo juego y se han visto los frutos”, señaló.
Todo para ser un slugger
Si existe alguien calificado dentro del clubhouse oriental para analizar el trabajo de Eduardo Díaz, ese es precisamente Rouglas Odor. Entre sus cargos tanto en Venezuela como en Estados Unidos ha estado el de coach de bateo y con todos esos conocimientos a cuestas, que lo han convertido en un especialista, cree que su ahora dirigido cuenta con el poder suficiente como para ser un slugger.
“Cuando él le da a la pelota, la pelota le salta al bate. Yo pienso que tiene todo el chance de, en un futuro no muy lejano, convertirse en un bateador de mucha fuerza, tener un alto OPS y pegar unos cuantos jonrones en Grandes Ligas. Y es que la velocidad que tiene en su swing, a la hora de sacar sus manos, considero que está por encima del average”, explicó el instructor zuliano.
“Estamos contentos de tenerlo y ver cómo desarrolla todo ese gran potencial que tiene”, finiquitó Odor.