Créditos Imagen: Eduard Bazardo Foto: Elio J. Miranda
José Ángel Rodríguez / Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Eduard Bazardo disfruta de su primera experiencia en la LVBP. Se percibe no solo en el dugout de Navegantes del Magallanes, equipo en el que por estos días forma parte de los elementos disponibles en el bullpen, sino también por la elocuencia con que expresa su presente.
El lanzador derecho forma parte de la lista de 73 peloteros venezolanos que han debutado antes en Grandes Ligas, que en la pelota rentada local. Se graduó con los Medias Rojas de Boston en 2021 y se estrenó con la Carabela el martes, ante Cardenales de Lara en el Estadio José Bernardo Pérez de Valencia.
“Debutar en Venezuela era mi sueño”, admitió el serpentinero a LVBP.com, antes del juego contra Leones del Caracas en el Estadio Universitario, el tercero del curso 2022-2023 entre los Eternos Rivales. “Me sentí muy emocionado, porque fue mi primera vez en el país y tenía muchas ansias de jugar acá”.
Bazardo lanzó el séptimo inning frente a la escuadra alada, a pesar de otorgar par de bases por bolas a Rangel Ravelo (primer rival enfrentado) y Odúbel Herrera, pudo salir airoso al no permitir hits ni carreras en su labor.
El escopetero, de 27 años de edad, fue designado para asignación por los patirrojos el 13 de octubre y cuatro días después se declaró agente libre. Una situación que no esperaba, pero le abrió la puerta para uniformarse por primera vez con los nautas.
“No esperaba que me fueran a sacar del roster de Grandes Ligas, pero son decisiones que toman los jefes allá arriba”, comentó. “En la última parte de la temporada me dieron la oportunidad de estar con el equipo grande y me fue muy bien”.
El maracayero fue subido el 1° de septiembre y se mantuvo en la Gran Carpa por el resto del calendario regular. Actuó en 12 juegos, permitió cinco carreras limpias en 16.1 capítulos, para efectividad de 2.76, con 11 ponches a su cuenta y dejó balance de 1-0.
“Vine porque quiero lanzar más innings, experimentar. La liga de mi país es buena y nos ayuda no solo a los venezolanos, sino a los que vienen de afuera a trabajar”, aseguró.
En Triple A, con el Worcester, su récord fue de 2-4, con una buena tasa de ponches de 9.4 % por cada nueve innings, en 57.1 episodios.
Durante el proceso de firmas internacionales en 2014, Boston le reclutó con un bono de solo 8 mil dólares y fue protegido en roster de 40 en noviembre de 2020, siendo considerado el prospecto 28 de la organización.
“Creo que tengo una herramienta (sobre el montículo) un poco extensa. Mis primeros años en Ligas Menores fueron de dos pitcheos: recta y curva. Ahora, con más experiencia agregué el sinker, splitter y slider, lo que me ha permitido extender el repertorio a la hora de trabajar a los bateadores”, glosó el diestro, antes de que considerar a la slider como su principal el envío, ese que usa para ponchar o salir de situaciones de apremio.
Así lo demostró en su reciente experiencia como ligamayorista. El 44 % de sus lanzamientos fueron en slider, generando abanicados en el 38,5 % de las oportunidades. La recta de cuatro costuras la usó en el 31,4 % de las veces, seguidas por el sinker (14,4 %) y el cambio de velocidad (9,7 %), de acuerdo a Baseball Savant.
“Soy un hombre que, si se cae el abridor, puede lanzar detrás de él, o también puedo hacerlo en el séptimo u octavo (inning), como quieran”, detalló sobre su amplia variedad de escenarios para competir. “Hasta en el mismo noveno puedo hacerlo, pero enseñándole antes al mánager (Yadier Molina) que puedo hacer el trabajo para que me ponga en esa situación”.
Sobre su función para este certamen con los eléctricos, admitió que le consultó al staff técnico del club al respecto. Aunque en principio estaba previsto que se encargara de la séptima entrada, ese lugar ha sido reservado a Henderson Álvarez cuando no ha abierto juegos. Siendo consciente de que pelearle el puesto a un lanzador con la jerarquía de Álvarez, requiere de tiempo y oportunidades.
CON LA NAVE HASTA DEFINIR FUTURO EN MLB
Lo extendido de su participación con Navegantes en el actual campeonato dependerá del movimiento de ofertas en su status como agente libre. Una vez acepte alguna propuesta para regresar al beisbol organizado, tendrá que detener su actividad con los bucaneros, debido a la falta de aval de MLB que aún pesa sobre la divisa.
Aunque Bazardo no se desespera e intenta aprovechar su tiempo en el circuito: “Ya hablé con mi agente, hay varios equipos interesados, pero está un poco lento el proceso. Tampoco estoy desilusionado, porque me da la oportunidad de jugar acá y tener más tiempo con los caballos de Venezuela”.
RELACIÓN FILIAL
Eduard es el hermano menor de Yorman Bazardo, quien también fuese grandeliga con Marlins (2005), Tigres (2007-2008) y Astros (2009). Con él conoció los terrenos de beisbol del país desde su infancia.
“Nos criamos juntos. Cuando él andaba con los Tigres (de Aragua, divisa donde Yorman actuó por 14 temporadas) yo viajaba para Maracaibo, Caracas o Valencia, siempre andaba con él y veía todos esos caballos (grandes peloteros), tenía la noción de cómo era el juego de acá”, recordó.
Acerca del consejo más importante que le ha dado su hermano mayor, admite que no ha sido sobre el juego, sino acerca de la vida.
“Sus consejos siempre fueron para que pensara en mi futuro, para que mantuviera el enfoque en lo que yo quisiera ser”, indicó. “Una de las cosas que los dos pensamos es que nadie es mejor que nosotros, pero tampoco nosotros lo somos”.