Créditos Imagen: Asdrúbal Cabrera Foto: USA Today
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Asdrúbal Cabrera dijo a los medios de Nueva York “que era tiempo de hacer un movimiento”, luego de ver su nombre en la segunda base del lineup que elaboró el manager Terry Collins, el viernes de la semana pasada. Era su primer partido después de pasar 10 días en la lista de incapacitados.
Después del triunfo de los Mets, 8-0, contra los Marlins de Miami, el miércoles por la noche, Cabrera pareció cambiar de opinión.
“Siempre he querido estar aquí”, aseguro el campocorto al periodista Dan Martin, del New York Post. “Este es un gran equipo. En el momento en el que dije eso, no estaba pidiendo ser cambiado. Solo que parecía que no tenían un plan para mí. Se lo tuvieran, me lo hubiesen dicho”.
Cabrera nunca antes jugó una posición diferente al shortstop con los Metropolitanos, hasta el viernes. La última vez que había actuado como camarero se remontaba al 2014, con los Nacionales de Washington.
Desde el día de sus comentarios, ha iniciado cinco de sus últimos seis partidos como intermedista. Collins aseguró que José Reyes se había desempeñado muy bien en las paradas cortas durante la ausencia del venezolano y que estaba bateando mejor.
Ahora, Cabrera está en medio de una buena racha. A partir de su regreso ha conectado 10 hits en 25 turnos (.400/.483/.600 con 1.083 de OPS), incluidos dos dobles y un jonrón. En ese lapso, los Mets tiene record de 5-1.
“Este equipo me gusta mucho”, destacó Cabrera. “Estaré bien jugando en segunda. Soy un pelotero profesional. Me gustaría quedarme en cualquier posición. Solo sentí que no tenía una buena comunicación con el equipo en ese momento. Ahora esperaremos a ver qué pasa”.
Su futuro inmediato tal vez será determinado por la magnitud de la brecha que se pudo haber abierto entre él y la gerencia del equipo, después de sus comentarios.
El campocorto de Washington, Trea Turner, sufrió una fractura no desplazada en la muñeca derecha el jueves y no tiene una fecha probable para regresar. Así que pese a la cómoda posición en la que se encuentran los Nats en la tabla de posiciones del este de la Liga Nacional, Cabrera podría ser una solución a la vacante dejada por Turner.
Al criollo le resta una opción en su contrato para 2018 por 8,5 millones de dólares, con una cláusula de rescisión $2 millones, así que sería un lógico candidato para ser canjeado a otro equipo, por cómo le está yendo a los Mets, independientemente de las declaraciones del infielder el viernes de la semana pasada.