Créditos Imagen: Foto: Mauricio Centeno/AVS PHOTO REPORT
Alberto Arnías | Prensa LVBP
Valencia.- Willy Paredes no cambia su forma de trabajar. El dominicano está consciente de lo exigente que es lanzar en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, por lo que siempre trata de salir temprano al terreno de juego para prepararse antes de cada encuentro.
“La clave es salir temprano, prepararme para tener una buena salida y dar lo mejor de mí para el equipo”, comentó el dominicano, que fue la segunda sustitución del Magallanes en el Draft de Semifinal y continúa con el equipo en el Clásico de Enero.
Paredes aseguró que está disfrutando su experiencia, primero con Leones del Caracas y ahora con los Navegantes. Los Eternos Rivales de la pelota rentada nacional. Nada mal para su primer año en el circuito.
“Me gusta este país, el beisbol se disfruta, se juega con pasión y eso me motiva para estar listo y ser parte de la fiesta. Es como en mi país donde siempre hay algo que aprender de este deporte”, dijo el derecho, de 26 años de edad.
El lanzador asegura que se siente orgulloso por poder vestir el uniforme de los dos equipos con más seguidores en la LVBP.
“Me han hablado mucho de la historia de los dos equipos. Soy un profesional, cuando estás de un lado o del otro siempre das lo mejor. Ahora estoy aquí para ayudar al equipo y seguir dando lo mejor de mí. Estoy disfrutando de cada juego.”, expresó.
El dominicano aseguró que entre su repertorio de lanzamientos confía en el sinker, pitcheo que lo ha mantenido trabajando en un gran nivel en el caribe y le llevó a ser considerado una promesa dentro de la organización de los Diamantes del Arizona.
“Yo simplemente soy un pitcher que miro a los bateadores desde que estoy en el bullpen, los observo y detallo con cuál lanzamiento batean. Luego me apoyo en el sinker, que es letal, con el que domino a los oponentes”, contó.
El extranjero alabó el gran trabajo que realiza Jesús Sucre, el que consideró uno de los mejores receptores con los que ha trabajado en su carrera. Aunque quedó fuera por lesión la semana pasada.
“Todo el tiempo me ponía de acuerdo con él para saber qué tipo de envíos iba a hacer. Sabía cuál es mi estilo, como que leía mi mente, con eso siempre salíamos adelante en los juegos”.
Hasta el viernes, el espigado taponero no había permitido carreras en 13.1 innings durante la postemporada, en siete salidas.
