Créditos Imagen: Junior Guerra Foto: AVS PHOTO REPORT
Pedro Felipe Hernández | Prensa LVBP
Caracas.- Si el cuerpo de relevo de Tiburones de La Guaira parecía intratable desde Edubray Ramos hasta Gregory Infante, ahora con la inclusión de Junior Guerra -quien tiene órdenes desde las Grandes Ligas de sólo actuar en rol de relevista-, el manager Renny Osuna tiene la mejor mano del juego con el bullpen.
Si los rivales no pueden hacer nada contra los abridores de los escualos, es muy poco probable que le hagan daño al relevo, pues apenas Osuna llama Ramos en un hipotético sexto episodio, le sigue el cubano Hassan Pena o Rafael Cova, entre el séptimo y octavo tramo. El trío ha estado sacando outs con pocos sobresaltos. Luego, llega el turno del cerrador con sangre fría, Infante, y hasta allí las oportunidades son mínimas para los bates contrarios.
Guerra salió de Cerveceros de Millwaukee, una organización que lo usó como abridor, pero desde hace mediados de 2018 prefirió utilizarlo exclusivamente desde el bullpen. Después, consiguió contrato con los Cascabeles de Arizona y, este equipo ya tiene un plan para el diestro 34 años de edad, que le cae muy bien a los salados.
“Yo siempre estoy disponible para lanzar año a año aquí en Venezuela. Hoy (sábado) estoy disponible para tirar un inning. Estaré en el bullpen a la disposición del manager. Si me quiere utilizar al inicio o al final”, dijo Guerra, antes del segundo encuentro del playoff contra Leones del Caracas. “Arizona me indicó que voy a trabajar de relevo a tiempo completo. Que me preparara desde un sexto inning hasta un noveno episodio. Es el mismo rol que tenía en Milwaukee”.
El nativo de San Félix, estado Bolívar, suma 10 temporadas en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, todas con Tiburones y aunque tuvo poca participación en la zafra anterior (5.0 IL en cuatro presentaciones), le pidió a Arizona permiso para jugar en Venezuela, como parte de su preparación con miras al Spring Training.
“Ellos (D-backs) lo entendieron perfectamente. Desde que comenzamos a discutir el contrato ellos entendieron perfectamente que yo necesito jugar aquí en Venezuela y más si mi rol va a ser de relevo”, dio a conocer el derecho. “Cuando MLB otorgó el permiso yo comencé a prepararme para jugar con Tiburones de La Guaira”.
Igualmente, Guerra se mantuvo entrenando por su parte, a pesar de no haber jugado en la ronda regular, luego de culminar la campaña en las Mayores.
“Realicé mi entrenamiento personal, al saber que podíamos jugar aceleré un poquito. Hice bullpen, live bp o juegos simulados”, explicó. “Vengo a ayudar al equipo, no vengo a adquirir el rol de nadie. Este es uno de los mejores relevos de la liga este año. Vengo a ayudar al equipo a ganar, si debo trabajar en el primer inning o en el noveno lo haré”.
Si el estratega los litoralenses necesita a un abridor ligamayorista, como es el caso Guerra, deberá esperar las restricciones que le mandaron.
“A mí siempre me ha gustado abrir, pero ya en la circunstancia y según la necesidad del equipo uno debe hacer los ajustes. Sin embargo, estaré lanzando un inning, descansaré un día, luego podré lanzar dos innings y cuando comience la segunda etapa podré lanzar hasta tres innings”, dejó claro Guerra.
De todas maneras, la llegada de Guerra al equipo escualo, aumenta las posibilidades de quebrar la recordada racha negativa sin campeonatos y, aún más cuando el serpentinero los acompañará por lo que resta de acción.
“Acompañaré el equipo hasta donde llegue. Ellos me pidieron que trabajara, que me cuidara obviamente”, soltó.
Los brazos desde el bullpen son la fortaleza de los escualos, ahora, con Guerra, lucen como si las batallas estuvieran ganadas.