Créditos Imagen: Osleivis Basabe Fotos: A. van Schermbeek
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Los triples se han convertido en una suerte de rareza. Al menos en el beisbol organizado, las cifras anuales han ido descendiendo de manera sostenida en los últimos años. Pero la LVBP transita el camino contrario. En lo que va de temporada, las conexiones de ese calibre emergen gracias a las Águilas del Zulia y en particular al veloz Osleivis Basabe, un pelotero que provee al campeonato de espectacularidad.
Una vez que conecta la bola con fuerza, sin enemigos por los senderos, a menudo termina su recorrido deslizándose en la antesala, en otras ocasiones ni si quiera necesita hacerlo. Llega parado, ante la mirada de impotencia de la defensa del club contrario.
“Tienes que ver cómo le das a la bola y hacia dónde sale el batazo, si ves que se proyecta por los callejones, obviamente hay que meterle a la velocidad, pisar el acelerador”, describió Basabe su arte en vías de desaparecer, el jueves, antes del desafío entre los rapaces y Leones del Caracas, en el Estadio Universitario. “Si observas que el jardinero hizo un buen corte, no hay que inventar mucho. Pero siempre tengo en mente ganar una base extra”.
Los scouts califican con un 65 la rapidez de piernas de Basabe y su capacidad para moverse entre las almohadillas. En la escala de los cazatalentos (del 20 al 80) esa evaluación apunta a un jugador élite. Muy por encima de la media (45-50). Aunque se trata de un arma que a lo largo del tiempo ha ido perdiendo letalidad.
Los equipos no usan la velocidad como lo hacían cuando los jonrones no eran el leitmotiv del juego. Los jugadores siguen siendo rápidos, tan rápidos o más que el utility de las Águilas, pero ¿para qué arriesgarse a ser puesto out, tratando de alargar un batazo, cuando el próximo hombre que se pare en el plato puede conectar un cuadrangular?
Antes de la jornada del jueves, la tasa de vuelacercas por juego era de 1,78, más de “medio” bambinazo que en la zafra anterior (1,20 HR/J) y por encima del récord del circuito, establecido en la campaña 2004-2005 (1,74 HR/J), cuando el calendario era de 63 encuentros, de acuerdo con los registros de Quality Sports.
Zulia no forma parte de esa fiesta. Amaneció con apenas cinco estacazos de vuelta completa, muy por debajo de la media de la liga por conjunto (22,9) y lejos del líder Navegantes del Magallanes (33).
“El triple es uno de los batazos más difíciles de conectar y tenemos la suerte, como equipo, de estar liderando ese renglón”, destacó el mánager Marco Davalillo. “Lo más importante para Osleivis, es que usa mucho los callejones, y aquí los estadios son amplios y si le agregas que corre muy bien las bases, puedes encontrar las razones de nuestro éxito con esas conexiones”.
Los zulianos marchan al frente del circuito con 11 triples, seis de ellos llevan la impronta de Basabe. Apenas a dos de la marca del club en manos de Jeff Stone (8), establecida en la campaña 1982-1983.
“No lo conocía (a Stone) y me enteré del récord del equipo hoy. Solo intento correr duro cuando meto la bola en el gap (pasillo) y si tengo la ocasión de conseguir una base extra, para ayudar al equipo, voy por ella, no pienso en el récord”.
Una vez que arranca a correr, no hay nadie más veloz que Osleivis Basabe en la liga
Al paso que lleva hará añicos la marca de Stone y pondrá en riesgo el registro de la LVBP, que comparten con 10 Joe Cannon (Magallanes, 1977-1978), Félix Rodríguez (Magallanes, 1976-77), Joe Hall (Oriente, 1992-1993) y Alexi Amarista (Anzoátegui, 2009-2010).
Si bien la tasa de tetra batazos ha ido en aumento, como ocurre en las Mayores, en la LVBP, los golpes de tres sacos no han disminuido. En la 2019-2020 se sacudieron 77 y en la 2020-2021, 54. En este instante van 44 y la proyección es de 83, lo que representaría la mayor cantidad desde la 2018-2019, la última vez que se desarrolló un calendario largo (85).
Por ahora, los triples de Basabe se traducen en el número más alto en la liga desde que Breyvic Valera (Margarita) y Luis Arráez (Magallanes), compartieron el liderato, con seis, en la 2016-2017.
La media en las Grandes Ligas en los últimos 12 años es de 788 triples por zafra. En 2021 el total cayó a 671, el guarismo más bajo de ese lapso, sin incluir la temporada acortada de 2020. David Peralta (Arizona), junto con Bryan Reynolds (Pittsburgh), encabezaron ambos circuitos con ocho, menos de la mitad de los conseguidos por Jimmy Rollins (Filadelfia), que comandó MLB en 2007, con 20.
Basabe está en su segunda zafra completa en Venezuela y todavía tiene que hacer ajustes, pero Davalillo le dejará seguir siendo agresivo cuando arranque a correr.
“Yo diría que en un 90% lo hace de la forma correcta. Así que lo veremos agarrar bases extras. Lo que para algunos jugadores es un doble, él lo convierte en un triple, gracias a su velocidad”.
El joven, de 21 años de edad, proviene de una familia de estirpe beisbolera y en este instante es el prospecto número 25 de los Rays de Tampa Bay, de acuerdo con MLB Pipeline. El toletero derecho llegó a la organización floridana el 12 de octubre de 2020, en un cambio con los Rangers de Texas que involucró a varios peloteros.
“Osleivis es tremendo atleta, con gran rapidez y versatilidad defensiva, puede hacerlo bien en el infield (segunda, short y tercera) y el outfield”, aseguró Marlon Roche, supervisor de scouts de Tampa Bay en el país. “Tiene mucho chance de batear en MLB y hasta llegar a ser un primer bate en ese nivel”.
Pese a su agresividad para galopar las almohadillas y su juventud, la promesa de las Águilas no es díscolo cuando empuña el madero.
“Desde siempre, desde niño, mi enfoque ha sido buscar un pitcheo en cada turno, concentrarme en el plan que tengo antes de ir a batear y no perder la paciencia si me cantan (en la zona) un pitcheo malo. Es lo que hago en cada turno”, puntualizó Basabe, que exhibe una línea ofensiva de .273/.345/.424, con 18 remolcadas, segundo del departamento en Zulia, y .769 de OPS.
“No trato de hacer mucho. Soy un bateador de contacto, que puede poner la bola en juego y a partir de ahí, hago lo que sé hacer”, agregó el zuliano, cuya rápido swing y capacidad atlética pueden ser las piedras fundacionales para desarrollar poder, mientras madura físicamente, según las estimaciones de los Rays.
“Creo que todavía debo mejorar mi defensa, mi juego en general y, pese a lo que estoy haciendo aquí, tengo seguir ajustando mi ofensiva”, advirtió sin conformismos.
Por eso es una esponja cuando está en el terreno. Trata de aprender de su entorno.
“Cada día me dicen algo o yo pregunto. En especial Alex (Romero), Alí (Castillo) y Silvino (Bracho). Me empujan a que sigan trabajando duro, fuerte, todos los días, para conseguir mis objetivos”.
Aunque el alumno los contagia con su energía y estimula a sus compañeros a explotar la herramienta de la velocidad.
¿Seguirá buscando triples? Claro que sí. Su sonrisa lo delata.
Los Rays de Tampa Bay creen que Osleivis Basabe puede llegar a ser un primer bate en las Mayores
EL DATO
Osleivis Basabe es hijo de Oleidis Basabe y sobrino de Jesús Basabe, quienes también firmaron con las Águilas del Zulia y son primos de Darwin Cubillán. Además, Osleivis es primo de los Luis Alexander Basabe (Medias Blancas), Luis Alejandro Basabe (D-backs), Olivier Basabe, quien fue drafteado en junio de 2017 por los Padres desde Faulkner University, y Luis Matos (Gigantes)… Osleivis fue reclutado originalmente por los Rangers durante el proceso de firmas internacionales del período 2017-2018, por un bono de 550.000 dólares.