Créditos Imagen: Mario Martínez Foto: Eddy Pacheco
María Álvarez | Prensa Águilas del Zulia / Prensa LVBP
Mario Martínez se incorporó esta semana a las Águilas del Zulia y fue agregado al roster de 35, luego que los Bravos de Margarita no le ofrecieran contrato en septiembre.
“Me siento muy contento de firmar con las Águilas del Zulia, ayudaré al equipo en donde me necesiten, sea en la primera base, en la tercera o en los jardines. Vine a dar lo mejor de mí”, señaló Martínez, que viene de jugar con el Parma en la Liga Italiana de Beisbol.
El barquisimetano, de 26 años de edad, firmó originalmente con los Cardenales de Lara y en las últimas dos campañas actuó con Margarita.
“Estoy agradecido con César Suárez (miembro del tren ejecutivo del Zulia) y a la organización de las Águilas del Zulia por darme la oportunidad de volver a la Liga Venezolana de Beisbol Profesional”, puntualizó. “Me dijeron que fuera a la Liga Paralela y tomara mis turnos para que volviera agarrar el ritmo. Me siento bien. Aquí hay un buen grupo de peloteros”.
El bateador derecho ligó .391 (46-18), con cinco jonrones y 18 remolcadas, en la filial de los rapaces en el Programa de Desarrollo, antes de ser subido.
En 2015 pasó la mayor parte del tiempo en la sucursal Clase A+ de los Medias Rojas de Boston, organización que lo dejó en libertad.
“Ellos en ese momento estaban buscando un cuerpo técnico para luego firmar a los agentes libres, cuando llamé en enero no había chance para mí, pues tenían muchos prospectos jóvenes. Entonces, decidí buscar en otras ligas y acepte trabajar en la pelota italiana”, contó.
“Fue la oportunidad que se me dio en ese momento (ir a Europa). La tomé con humildad y di lo mejor de mí. Fue difícil adaptarme, ya que en Italia se juegan los viernes y sábados, el resto de la semana solo se practica”, agregó. “Allá, los equipos no son organizados. No trabajan todos los días contigo. Yo por lo menos entrenaba a diario para mantenerme y no perder el ritmo”.
Martínez, quien fuera un cotizado prospecto de los Marineros de Seattle durante la década anterior, aseguró que pese a pasar por momentos de desilusión, no se rinde en su afán de volver al beisbol organizado.
“De repente no hay momentos tan buenos, pero pienso que mientras tenga un uniforme puesto, aún existe la posibilidad de cumplir metas y sueños”.
