Créditos Imagen: Delmon Young Fotos: AVS PHOTO REPORT
Hugo Guerrero | Prensa LVBP
Valencia.- Algo inusual en estos tiempos de nuestro beisbol, se registró el pasado 6 de diciembre en Puerto La Cruz. Magallanes, visitando a Caribes de Anzoátegui, presentó una alineación que, por primera vez en casi 40 años, contenía a cinco peloteros no nacidos en Venezuela, haciendo recordar, aquellas temporadas navieras de los años 80.
Días antes, la gerencia turca anunciaba las contrataciones de los dominicanos Arismendy Alcántara y Rymer Liriano y, sin esperar mucho, fueron incluidos en el roster de 32 jugadores para la novena semana de la nave. Ambos quisqueyanos, formaron parte de ese lineup ante los anzoatiguenses, además de su coterráneo Alfredo Marte, el colombiano Reynaldo Rodríguez y el estadounidense Delmon Young.
A partir de ese momento, el número de banderas venezolanas ha seguido siendo cuatro en la nómina titular de cada compromiso de los bucaneros. Sin Alcántara en el equipo, Adonis García aterrizó no sólo para hacer soñar a la afición turca con un nuevo título, sino también, para mantener la cuota de foráneos juego a juego.
“Eso indica que tenemos un pitcheo criollo que nos puede hacer el trabajo y no contamos mucho con lanzadores importados. Solo tenemos a (Ryan) Kussmaul y (Alfredo) Fígaro, el resto son peloteros de posición que van a estar en juego”, fue la explicación del manager Luis Dorante, ante tal hecho poco frecuente en la actualidad.
En la temporada 2011-2012, se registró una situación semejante para los valencianos, cuando seis importados de posición vieron acción a lo largo de esa campaña con la nave, pero, nunca coincidieron más de cuatro en el terreno de juego, de acuerdo con la guía de medios de los turcos.
Muy probablemente habría que remontarse a la década de los 80, época en la que se presenciaba un alto número de importados en el campo de manera simultánea con el uniforme filibustero. Tal como sucedió en la campaña 1985-1986, cuando Mark Funderburk, Benito Distefano, Joseph Orsulak, el cubano Roberto Ramos y Barry Bonds, conformaron la alineación magallanera en una buena cantidad de compromisos, siendo este último entre aquellos cinco, el que disputara la menor cantidad de encuentros en esa contienda (44).
Dos temporadas atrás, en la 1983-1984, el propio Distefano, Orsulak, Stanley Cliburn, William Hatcher y Robert Miscik, coincidieron en el lineup inaugural del Magallanes. Así como sucedió, en la 1982-1983, zafra en la que Mark Bradley, Robert Skube, John Rabb, Michael Davis y Kelly Paris también saltaron al terreno al mismo tiempo para disputar el primer juego de los Navegantes. En esa campaña, 16 peloteros de posición extranjeros vistieron el uniforme blanco con rayas azules.
“Ante tantas limitaciones y restricciones a nuestros peloteros por parte de las organizaciones de los Estados Unidos, la gerencia ha tenido que buscar en el extranjero. Es algo que se nos escapa de las manos y no podemos controlar”, fue otra de las razones que ilustró Dorante, con lo que sucede actualmente al Magallanes.
Ciertamente, sólo tres días antes de ese primer desafío con cinco foráneos en play, se observaba por última vez en la zafra al jardinero Moisés Gómez y al infielder Wilkerman García. Ambos, no alargaron su estadía con los eléctricos por petición de sus equipos en las Grandes Ligas, Rays de Tampa Bay y Yanquis de Nueva York, respectivamente. Una semana atrás y por las mismas circunstancias, a Luis Arráez también le caducaba el tiempo de juego en Venezuela permitido por los Mellizos de Minnesota.
Reynaldo Rodríguez llegó avanzada la campaña y promedio un jonrón cada 15 turnos al bate
EL SABOR LATINO PREVALECE EN LA IMPORTACIÓN NAVIERA
Otro aspecto interesante, pero más recurrente en los últimos años en la LVBP, es el predominio de peloteros latinos en la importación de los equipos, tal como sucede con Cardenales de Lara y Águilas del Zulia.
“No me sorprende, el beisbol ahora es así. La mayoría de esos muchachos no tienen restricciones y se entiende que ellos también han jugado pelota invernal, aspecto que nos facilita a nosotros poder contactarlos. Eso es lo que vamos a ver de ahora en adelante en esta pelota”, expresó Dorante, que también consideró importante la rapidez con la que puedan arribar a Venezuela en esta etapa de la temporada, jugadores que estén en países aledaños.
En Magallanes, cinco de los siete foráneos inscritos en la nómina, son provenientes del Caribe. De ese número de jugadores, mandan los dominicanos, con Alfredo Marte y Alfredo Fígaro más tiempo en la organización, además de Rymer Liriano acompañando a sus paisanos. A ellos, se les suma el cafetero Reynaldo Rodríguez y el antillano Adonis García.
“Es algo bueno que haya varios dominicanos aquí, es agradable para mí”, dijo Marte, que es el único perteneciente a las Águilas Cibaeñas en la liga de su país, a diferencia de sus compatriotas que militan con el acérrimo rival, Tigres del Licey. “La principal razón es que han parado a varios peloteros buenos del equipo y en Quisqueya hay menos conjuntos. Por eso, muchos de nosotros quedamos fuera de roster y recurren a los nuestros para que vengamos a ayudar”.
En total, siete latinos han vestido la camiseta eléctrica a lo largo de la zafra, recordando las participaciones de los quisqueyanos Alcántara y José Domínguez. Sin embargo, esa cantidad, es apenas la mitad de caribeños que actuaron en la campaña anterior con los Navegantes.
“Yo creo que la forma de jugar de ellos también es un plus, se involucran más rápido en lo que es el juego del Caribe y eso nos da una tranquilidad a nosotros como dirigentes”, consideró el piloto de la nave Dorante.
Ya, sin Jhonny Davis, Andy Wilkins, Chuck Taylor, Michael Antonini, Trevor Frank y Zack Segovia en la nómina, los bucaneros mantienen a Delmon Young y Ryan Kussmaul, como los únicos estadounidenses sobrevivientes en la presente zafra. Young, líder de la liga en jonrones e impulsadas y Kussmaul, es el lanzador con más apariciones en lo que va de campaña por los turcos.