Créditos Imagen: Luis Ugueto Foto: Prensa Tigres de Aragua
Alexander Mendoza / Andriw Sánchez | Prensa LVBP
Caracas.- Osvaldo Virgil, legendaria figura del beisbol del Caribe al ser el primer dominicano en jugar en las Grandes Ligas (1956, Gigantes de Nueva York), fue manager de Leones del Caracas en la temporada 1972-1973 por mera casualidad. Se suponía que el piloto melenudo debía ser el cubano Tony Pacheco.
Los problemas de salud de Pacheco le abrieron la puerta del Universitario a Virgil. Y ocurrió una de esas cosas que convierten a la vida en una ruleta impredecible: la casualidad se convirtió en éxito. Virgil condujo al Caracas al título de la campaña, tras vencer en cinco juegos a Águilas del Zulia. Poco después sucedió algo impensado, pues Leones no repitió al quisqueyano, quien se terminó yendo a Tigres de Aragua para el campeonato de 1973-1974.
Algo muy similar le acaba de ocurrir a Luis Ugueto, aunque con Cardenales de Lara.
El caraqueño fue el piloto monarca de la temporada 2019-2020. Sus pájaros rojos se alzaron en siete juegos sobre Caribes de Anzoátegui. Después de asistir a la Serie del Caribe, y de constante comunicación con las oficinas crepusculares, que le llegaron a ofrecer el puesto de coach de banca de José Moreno, Ugueto decidió firmar como estratega de Aragua.
Que un estratega quede campeón en la LVBP y comience la temporada siguiente al frente de un equipo diferente, es tan raro que Virgil y Ugueto son los únicos casos en la historia del circuito. Nadie más. Solo ellos.
“Yo estoy agradecido con Cardenales por lo que yo viví con ellos. La gerencia de Tigres me ofreció venir para acá como manager. Como dije el año pasado, ser técnico nunca me llamó la atención, a mí me gusta gerenciar, pero se me presentó la oportunidad el año pasado, lo discutí con mi familia y acepté”, le dijo Ugueto al departamento de prensa bengalí cuando llegó a Maracay. “Desde pequeño siempre me ha gustado observar el juego, eso me ha ayudado, este año se me presenta de nuevo el chance de dirigir y puedo decir que le he agarrado el gusto”.
Cuando Virgil se fue al Aragua no fue en malos términos con Caracas, pues los capitalinos ya tenían un acuerdo aplazado por la enfermedad de Pacheco. Virgil no obtuvo ningún fruto en la Ciudad Jardín en la campaña 1973-1974. De hecho, nadie ganó algo ese año. El torneo se suspendió en los playoffs por una huelga de peloteros.
Pero en la campaña 1974-1975, Virgil ratificó que era el estratega de la época en la LVBP. Ganó el título con los bengalíes al batir a Navegantes del Magallanes en seis careos. Su dominio se afianzó en la zafra 1975-1976 tras obtener el bicampeonato con los rayados; esa vez venció a Cardenales en siete encuentros. No volvería a ganar un título en Venezuela hasta la 1982-1983, cuando dirigió a Tiburones de La Guaira a ganar en seis compromisos contra Leones.
Ugueto, a diferencia del Virgil de 1973, no llega a un equipo extraño. Él conoce bien las intimidades de Aragua. Como pelotero activo vivió momentos poderosos con Tigres. Incluso fue pelotero y protagonista en el último título alcanzado por la franquicia, en la campaña 2015-2016. En el tercer juego de la serie final contra Magallanes, le dio un hit decisivo a Hassan Pena que le indicó a los bengalíes el sendero de la remontada. En aquel momento el enfrentamiento estaba 2-0 a favor de la Nave.
“Me llegaron como cien recuerdos de golpe, la de la Serie del Caribe, y la del último título”, rememoró Ugueto. “Todos esos recuerdos van en uno solo. Es ese corazón para venir de atrás. Estábamos abajo, había dos outs, yo tenía dos strikes y pude conectar el hit y pudimos empatar el juego. Es tener corazón y esa entrega para salir adelante”.
Ugueto, al igual que Virgil, fue grandeliga, aunque su carrera en el máximo nivel no duró tanto como la del dominicano. Vistió la casaca de Marineros de Seattle entre 2002 y 2003. En Venezuela jugó 15 temporadas antes de retirarse con el título de Aragua en la 2015-2016. Estuvo con Cardenales por 10 zafras, con Caribes de Anzoátegui dos y Águilas del Zulia una. Fue campeón de la Serie del Caribe en 2009, siendo refuerzo del Aragua de Buddy Bailey.
“Este equipo para mí representa mucho. Un equipo que en dos ocasiones me llevó como refuerzo tanto para República Dominicana como para México, donde en 2009 logramos el último campeonato de la Serie del Caribe”, recordó Ugueto. “Estaba al mando Buddy (Bailey), luego, en mi último año como profesional, los Tigres me dieron la oportunidad y fue el año en el que quedamos campeones y decido dar el paso de retirarme. Después de eso yo no pensaba en managear. El año pasado Cardenales me dio la oportunidad y se logró el título, ahora vuelvo aquí con esta afición que me gusta mucho”.
Es raro ver casos como el de Virgil y Ugueto, pues –como dicta la impetuosa lógica- el éxito tiende a ser una fórmula que se usa hasta gastarse. Pero todo en la vida puede ocurrir. La próxima gran coincidencia puede ser que Ugueto quede campeón con Aragua, como Virgil. Tal vez sí, quizás no… ¿Quién sabe? Es beisbol.
EL DATO
Osvaldo “Ozzie” Virgil jugó durante 13 años en las Mayores y además de ser el primer dominicano en ese nivel, rompió la barrera del color en los Tigres de Detroit, durante la temporada de 1958. Tras su retiro, dirigió a Águilas Cibaeñas y Leones del Escogido Lions, en República Dominicana; Cardenales de Lara, Leones del Caracas, Tiburones de La Guaira y Tigres de Aragua, en Venezuela; además de Venados de Mazatlán Venados en México. Es padre del receptor Ozzie Virgil Jr., que jugó para Aragua en la temporada 1977-1978 (Ambos en la gráfica de Últimas Noticias).