Créditos Imagen: José Altuve Foto: ABC News
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- José Altuve tratará este lunes de extender su racha de partidos con imparables. El domingo consiguió prolongarla a 15, una marca en su carrera.
El segunda base también igualó su marca personal de inatrapables en un partido con cuatro, se quedó a un triple de completar la escalera, elevó a 37 sus encuentros multi hits, tope en la Liga Americana, y a 15 sus cuadrangulares, mientras se consolidaba en el liderato de bateo del circuito con un sólido promedio de .358.
“Cada vez que lo veo conectar tres o cuatro hits en un juego, pienso que eventualmente sonará cinco. Nunca me sorprendo porque puede hacer cualquier cosa en el terreno”, dijo el manager los Astros, A. J. Hinch, a MLB.com.
Desde 2011, cuando Altuve debutó en las Grandes Ligas, solo Miguel Cabrera (24) supera los 23 encuentros de cuatro o más indiscutibles del camarero, según Baseball Reference.
“Por eso es nuestro catalizador”, agregó Hich.
Las estadísticas hablan por sí solas. Durante su seguidilla de desafíos con imparables, Houston exhibe récord de 10-5, mientras que en los triunfos de su equipo, Altuve liga para .373/.440/.585, con nueve jonrones, 41 remolcadas y un OPS 1.025.
Los siderales iniciarán la semana con récord de 65-33, el segundo mejor de las Mayores, solo superado por los Dodgers de Los Ángeles (68-31), y sin enemigos en el oeste de la Americana.
A principios de mes (4 al 9 de julio), Altuve impuso una marca para la franquicia con cinco desafíos al hilo de tres imparables, lo que le convirtió apenas en el noveno jugador en hacerlo desde 1913 y el primero desde George Brett en 1976, cuando hilvanó una cadena de seis.
Ahora mismo, es líder en hits en el joven circuito (134), se encamina a su cuarta campaña seguida con más de 200 petardos y a su segundo título de bateo consecutivo, tercero en los últimos cuatro años.
Altuve también encabeza las Mayores con .420 de average en 44 partidos como visitante, luego de ligar .376 fuera del Minute Maid Park en 2016.
“No lo sé. Me gustaría tener una respuesta para eso”, dijo Altuve con relación a su tórrido bateo en la carretera, que contrasta con su promedio de .303 en 51 juegos con Houston de local. “Tan pronto como llegue a casa trataré de mantenerme en mi juego, sin intentar cambiar nada, pero los números dicen que existe una gran diferencia con respecto a las giras. No tengo una respuesta para eso porque he estado trabajando realmente duro para mantener el mismo enfoque en cualquier lugar donde juegue”.
A lo largo de su carrera, Altuve baja un poco su producción durante la segunda mitad del calendario, no es algo drástico, pero existe una diferencia en sus totales. Este año, en julio, el mes en el que se llega a la mitad del calendario, golpea para .479 (71-34), el segundo mejor promedio de todo el beisbol.
“El escenario soñado para todo manager, coach o compañero de equipo, es saber que puede jugar de esa manera todo el año”, destacó Hinch. “Está en el terreno todos los días. Es difícil darle descanso. Es notable”.