Créditos Imagen: Héctor Giménez Foto: AVS PHOTO REPORT
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Héctor Giménez espera una oportunidad para estar en el terreno con Cardenales de Lara y aportar toda su experiencia en postemporada, a partir de este viernes, cuando se inicie la Serie Final contra Águilas del Zulia, en Barquisimeto.
El curtido inicialista luce cuatro anillos de campeón, tres con Tigres de Aragua y uno con Magallanes, mientras que cuenta 181 juegos en playoffs, más que ningún otro miembro del roster crepuscular. El receptor Gustavo Molina es el único que se le acerca y reúne casi 100 desafíos menos (84), que el bateador ambidiestro.
“Sé lo que puedo hacer”, destacó Giménez, antes del último juego de la semifinal frente a Tiburones de La Guaira, en el Estadio Universitario. “Pienso que estoy capacitado para aportar al equipo. En este instante las circunstancias no se están dado para que pueda jugar todos los días. Pero no es algo que esté en mis manos. Lo único que puedo controlar es seguir preparándome, como lo hago todos los años, y estar listo para cuando el manager (Luis Dorante) me necesite. Por ahora, solo puedo apoyar desde la banca”.
Giménez solo ha consumido tres turnos como emergente en la postemporada. Una molestia en la rodilla izquierda y la presencia del grandeliga Luis Valbuena, desde mediados de diciembre, lo llevaron a ver los partidos desde el dugout.
Así que tuvo que asumir otro rol durante una etapa del campeonato en la que está acostumbrado a rendir y ser protagonista. Desde la campaña 2004-2005, exhibe una línea ofensiva de .271/.347/.494 y sus 31 cuadrangulares son el tope del circuito, mientras que las 121 carreras impulsadas que acumula, solo son superadas por Oscar Salazar (129), quien se retiró este año.
Así que para jóvenes como Juniel Querecuto, incluso Carlos Rivero y Jesús Montero, puede servir de referencia para el reto que encararán a partir de este fin de semana.
“Siempre he estado abierto a la posibilidad de hablar con los más jóvenes, que no tienen esa experiencia en esta liga y sobre todo en estos días”, destacó el yaracuyano, de 34 años de edad. “Aprendí en estas instancias que todos quieren hacerlo bien y muchos entran en el desespero de hacer las cosas perfectas o más allá de lo que se puede. Eso te lleva a que aceleres tu juego y termina afectándote. Mientras puedas controlar las emociones y ejecutar el plan que traces, tendrás mejores resultados. Pienso que se debe ir pitcheo a pitcheo, jugada a jugada. Así las cosas saldrán mejor”.
Una opinión valiosa que podría orientar la actuación de algunos de sus compañeros, pero quizás su estatus cambie en pocas horas y vuelva a la alineación regular de Lara, para no solo apoyar con un consejo.
Ildemaro Vargas se encuentra en Estados Unidos cumpliendo compromisos con los Diamantes de Arizona y es posible que su regreso al país se produzca cuando la serie se mude a Maracaibo. Pero es algo que todavía no está claro. Mientras que Valbuena tendrá que viajar en cualquier momento, después de concretar un acuerdo con los Ángeles de Los Ángeles.
“Estoy listo. Recuperado de las molestias en la rodilla, que me limitaban a jugar. Ya puedo estar en el terreno”, afirmó. “Aquí estoy trabajando, listo para cuando el manager me necesite y dar el 100%”.
Vargas no estuvo en el quinto juego de la serie contra Tiburones y el piloto Dorante prefirió sustituirlo por Luis Núñez, su principal suplente de infield, en lugar de mover a Valbuena a la intermedia y colocar a Giménez en la inicial. Pero en la Final, el ambidiestro con más cuadrangulares en la historia de la LVBP (76) podría ser mucho más que un emergente.
“Asumo con tranquilidad (la función en la que liga de 3-2). Solo trato de ejecutar”, señaló Giménez, sin darle muchas vueltas al asunto. “Sales con un plan a dar el 100%. Si no te sale bien, queda la satisfacción de dar lo mejor de ti en ese turno”.
