Créditos Imagen: Silvino Bracho Foto: Eddy Pacheco
Wilmer Reina | Prensa LVBP
Maracaibo.- Las Águilas del Zulia aplicaron la misma fórmula que utilizaron en su primer triunfo de la serie semifinal, para tomar ventaja frente a Caribes de Anzoátegui en el tercer desafío de la serie.
Ante la mejor asistencia de la temporada en el Estadio Luis Aparicio “El Grande”, el equipo rapaz hizo respetar su nido al vencer por la mínima diferencia, 3-2, a la Tribu, aprovechando las ventajas que concedió su rival y amparados en una solvente labor de sus lanzadores.
Un par de errores de la defensiva de Caribes le abrió la oportunidad a la toletería de las Águilas de fabricar dos anotaciones en el segundo episodio. Una pifia del camarero Luis Hernández le permitió al colombiano Reynaldo Rodríguez embasarse abriendo la entrada, seguidamente José Pirela conectó un batazo de botes altos que apresuró la intervención del lanzador Wilfredo Ledezma, quien falló en su disparo a la inicial y envió la pelota al jardín derecho, provocando la anotación que abrió el marcador.
Un sencillo de Alex Romero aumentó la ventaja para el equipo rapaz, mientras que Pirela, con un doblete productor de una anotación en el cuarto capítulo, le dio a las Águilas la ventaja definitiva en el marcador.
“Cuando afrontas a un rival de esta categoría, hay que ser muy inteligente, ejecutar de la mejor manera cada lanzamiento y jugar de forma perfecta a la defensiva. Creo que hicimos las cosas correctas y por eso podemos darle este gusto a la afición”, manifestó el manager Lipso Nava.
“El trabajo de los lanzadores fue sensacional, lograron sacar los outs importantes y supieron contener cada una de las amenazas. Lo sigo diciendo, nos enfrentamos a un equipo muy difícil”, agregó el estratega.
Desde ese momento, los brazos del Zulia se encargaron de mantener a raya a la recia ofensiva indígena. Con la diferencia de una anotación en la pizarra, el zurdo Edgar Alfonzo, Leonel Campos y Silvino Bracho, se crecieron sobre la lomita para concretar el triunfo.
“Estamos enfocados en sacar out por out, sin pensar más allá. Contamos con una gran defensa y con un plan para cada bateador, afortunadamente estamos ejecutando buenos pitcheos y eso nos permite sacar la mayor cantidad de outs sin darle ventajas a los bateadores”, comentó Campos, quien fue fundamental con su labor perfecta de 1.2 innings de labor, que le dejó la escena servida a Bracho para acreditarse su segundo rescate frente a Caribes.
El abridor aguilucho Rolando Valdez cumplió a cabalidad con la tarea encomendada. El mexicano completó cinco episodios en los que apenas toleró una anotación y ponchó a cuatro rivales, para conseguir el lauro.
Caribes anotó en el quinto y el sexto, producto de un roletazo al cuadro de Niuman Romero y un sencillo de Mario Lissón, respectivamente.
DESDE EL TERRENO
Oswaldo Arcia no viajó a Maracaibo con Caribes debido a que se mantiene con molestias en la cadera… Alexi Amarista se integró al roster de la tribu luego de cumplir compromisos con los Rockies de Colorado… El piloto de Caribes, Omar López, viajará este lunes a Estados Unidos para asistir a la convención de los Astro de Houston y regresará al país el 18 de enero, para un eventual sexto juego de la semifinal en Puerto La Cruz… José Tábata se repuso de sus dolores en la muñeca derecha y pudo ser alineado con las Águilas… El cubano Misael Siverio será el encargado de abrir el cuarto juego de la serie por el equipo rapaz, mientras que Ángel Ventura será el lanzador estelar de los orientales… Daryl Thompson será el quinto en la rotación de Caribes… Lipso Nava, manager de las Águilas, manifestó que el abridor Wilfredo Boscán sigue en evaluación médica, por lo que está en duda su lugar en la rotación.
EN CIFRAS
Al tercer juego de la semifinal asistieron 17.320 aficionados, la más alta concurrencia en lo que va de temporada en el Luis Aparicio “El Grande” y la segunda más elevada de toda la temporada, incluyendo la ronda regular. El récord los tiene el partido Caracas-Magallanes, en el Universitario, con 17.343 el 19 de diciembre… José Pirela llegó a 84 imparables en postemporada, la tercera mayor cantidad en la historia para un jugador de las Águilas.