Créditos Imagen: Marco Davalillo Fotos: A. van Schermbeek
José Luis López | Prensa LVBP
Caracas.- “Veo mucho entusiasmo entre los muchachos y contento de que estén sanos, eso es clave para cualquier jugador”. Con esas palabras del mánager Rouglas Odor, comenzaba a rodar en serio la pretemporada de las Águilas del Zulia.
El optimismo de Odor se diluyó rápidamente. La noche del domingo 7 de noviembre, con las Águilas en el sótano con marca de 4-10, la directiva del club decidió cambiar de mánager y convocó a Marco Davalillo, quien se encargó de las riendas del equipo hasta el miércoles 22 de diciembre, trecho en el cual tuvo registro de 16-19. Récord que le impidió el cometido de alcanzar la clasificación, pues los rapaces terminaron con balance de 20-29 en los 49 juegos de su calendario, en el séptimo lugar de la tabla de posiciones y a cinco juegos de la clasificación.
“La decisión sobre el despido de Rouglas Odor, se debe a que el club no alcanzó los objetivos establecidos durante esta etapa de la temporada", señalaba el comunicado oficial de las Águilas, dado a conocer la mañana del lunes 8 de noviembre, día en el cual Davalillo quedaba al frente del equipo.
Evidentemente, Odor no le encontró la vuelta al equipo en los primeros 14 juegos. Davalillo pareció, al final de los 35 desafíos en los cuales diseñó estrategias, que ya conseguía el modo de ganar más seguido.
Las Águilas fueron oficialmente eliminadas la noche del martes 14 de diciembre, mientras descansaban de una agotadora y adversa gira por Macuto, Caracas y especialmente Puerto La Cruz. Triunfo 8-2 de Bravos de Margarita sobre Tiburones de La Guaira en Macuto, dejaba fuera de combate a los escualos y por retruque al conjunto zuliano.
Al día siguiente, los rapaces, ya sin nada por lo cual pelear, apoyados en un inmenso corazón, tuvieron marca de 6-1 en sus últimas siete presentaciones, las cuales transcurrieron ante los tres mejores clubes del campeonato, según rezan sus respectivos desempeños: Navegantes del Magallanes, Cardenales de Lara y Leones del Caracas. Ello les permitió cerrar campaña con cinco juegos de diferencia sobre La Guaira, definitivo inquilino del sótano, posición ocupada la mayor parte del torneo por los aguiluchos.
Hay mucho talento en este club
Marco Davalillo fue el primero en analizar lo que había ocurrido, en declaraciones al departamento de prensa de las Águilas.
“El equipo no pudo sobreponerse de un comienzo difícil. A pesar de ser un club pleno de talento emergente combinado con buenos jugadores de experiencia en todas sus líneas. Lamentablemente, jugadores jóvenes como Yonathan Perlaza y Osleivis Basabe, quienes empezaban a rendir en la etapa final, sufrieron lesiones. Y otros como José Herrera, Andrés Chaparro y Simón Muzziotti, recibieron órdenes para detener su actuación en el torneo. Muzziotti y Chaparro apenas habían iniciado su desempeño cuando debieron salir del equipo. El jardinero Luis Alexander Basabe pudo mantenerse junto al grupo de jugadores de experiencia. Y tuvimos que apoyarnos luego en muchachos como el intermedista Jackson Chourio -de tan solo 17 años de edad- y el inicialista Santiago Rincón, quienes afortunadamente mostraron lo que son capaces de hacer en esas dos últimas semanas de torneo y su estupenda proyección hacia el futuro", expresó con total convencimiento el mánager aguilucho.
Osleivis Basabe es una de las figuras de la pujante juventud de las Águilas del Zulia
“Al tomar la dirección del equipo, consideraba combinar el talento emergente con los elementos de experiencia. Esta combinación no está por debajo de los otros siete equipos de la liga. Este es un equipo competitivo y con futuro. Lamentablemente, las cosas no salieron. Eso me hace sentir mal con la fanaticada aguilucha, que está comprometida con el club”, señaló Davalillo con cierta tristeza.
El estratega también analiza lo que puede ser su futuro con las Águilas.
“Antes de asumir por segunda vez el cargo de mánager de este conjunto, tuve varias conversaciones con la gerencia y hablamos de un eventual futuro. En este instante, desconozco cuál será mi porvenir con respecto a la organización. Lo que sí puedo asegurar es que estoy orgulloso de vestir la camiseta de las Águilas del Zulia. A la orden estoy para seguir al comando de este grupo competitivo y de gran futuro. Estoy disponible para ello”, concluyó con gran optimismo.
Nuevas estrategias, eventuales regresos y dos nacionalizaciones
“Trabajamos arduamente para darle al equipo las herramientas necesarias para ser contendientes al título y retomar con rapidez la senda del triunfo”.
Así rezaba el párrafo final del comunicado del pasado lunes 8 de noviembre, donde las Águilas anunciaron el cese de funciones de Rouglas Odor como mánager y la llegada de Marco Davalillo para asumir el cargo.
En declaraciones ofrecidas por Luis “Yoyo” Amaro, gerente general del conjunto zuliano al circuito radial del equipo, la filosofía de trabajo se encuentra inalterable, aunque los resultados no hayan sido los esperados.
“No cumplimos las metas trazadas de clasificar y ganar el campeonato. Muchas cosas propias del beisbol no se dieron. Si algo me complace es que los demás clubes respetan nuestro talento. Varios técnicos y directivos me decían que no se explicaban cómo estábamos en el sótano del torneo. Pensábamos jugar en enero. Tanto Rouglas Odor como Marco Davalillo lo dieron todo desde el puesto de mando. Pero en el terreno perdimos los seis extra innings que jugamos y dejamos un promedio entre 14 y 16 corredores por juego. Al menos la mitad de nuestras derrotas fueron por cosas que debimos hacer y no hicimos. Ejemplo de ello lo aporta Humberto Arteaga, para mí el mejor campocorto defensivo del torneo, cometió 13 errores, en un año atípico. Lo bueno es que la próxima temporada los jugadores tratarán de quitarse esa espina”, comentó Amaro a modo de introducción.
De inmediato, el gerente general se refirió al factor importación, que ha sido tan criticado por los parciales del club.
“Nuestra importación fue limitada y prefiero hablar de modo colectivo. Nos enfocamos en contratar pitchers y así llegaron el zurdo Braulio Torres-Pérez y el derecho Arik Sikula. Más tarde, arribó el relevista Brandon Brosher. Los abridores ayudaron a pelear en una liga en la que los dos últimos años el pitcheo bajó de eficacia. Lamentablemente, no bateamos con gente en tránsito. Yonathan Perlazza y José Briceño, lograron fuertes batazos, pero en una gran cantidad de veces totalmente de frente. Otro caso es el del jardinero Ángel Reyes. Sus primeros 20 juegos fueron de deficiente rendimiento. Pero desde la mitad del calendario se transformó para terminar bien por encima del potro de los .300 puntos. Como se puede apreciar, se transformó por completo”, evaluó el directivo, que también sorprendió con algunos anuncios.
“Al relevista Cody Mincey, de tan buena actuación, lo tenía firmado desde la tercera semana de noviembre y por esos avatares para obtener la visa, llegó siete juegos después de haberlo asegurado. Lo quiero repetir el próximo año y ya hemos hablado sobre ello. Por otro lado, dos lanzadores adelantan sus trámites para obtener la nacionalidad venezolana. Ellos son el californiano Arik Sikula y el dominicano Logan Durán. Los dos quieren jugar como nativos con las Águilas", anunció complacido.
Seguidamente abordó el tema de la abundante sangre joven que tiene el equipo.
“Esta temporada dimos oportunidad a los lanzadores Eiberson Castellanos, Giussepe Velásquez y Zaquiel Puentes, entre otros. El año anterior le dimos confianza a Alexander Muñoz, quien no pudo acompañarnos en esta temporada. Para el próximo torneo contaremos con Mario Sánchez, a quien obtuvimos desde Bravos de Margarita y quien casi con seguridad será nuestro primer abridor. Adelanto que pienso hacer cambios para buscar lanzadores", ponderó Amaro, quien pasó a desmenuzar los problemas que impiden formar el equipo que quisiera y también conversó sobre peloteros consagrados que añoran sus días como miembros del conjunto.
Ángel Reyes fue el principal impulsor en el medio de la alineación del Zulia
“Para poder confeccionar nuestro club, tenemos que llevarnos por los planes de los jugadores que pertenecen al beisbol organizado, como son Perlazza, Chaparro y Herrera. Para la próxima campaña, peloteros como José Godoy, Yohel Pozo y Adrián Sánchez, ya serán residentes en Estados Unidos y podrán venir a jugar sin mayores apremios. A principios de este diciembre, José Pirela, Énder Inciarte y Ernesto Mejía, me comentaron que desean unirse a las Águilas en la temporada 2022-2023. Ojalá así sea. Estoy optimista con ellos. Espero contar con Héctor Sánchez, Luis Alexander Basabe, José Briceño y Humberto Arteaga desde el principio. Luis Alexander es un jardinero central sobre el promedio en esta liga. Los jóvenes Jorbit Vivas y Livan Soto son otros talentosos jóvenes que me han expresado su deseo de jugar en la venidera contienda. Tenemos profundidad y como prueba de ello, varios muchachos se graduaron este año en el equipo”, agregó con desbordante optimismo. “Los mejores años vendrán pronto. Mientras tanto, trabajaremos con un Plan A, un Plan B y un Plan C. Para siempre tener los pies sobre la tierra”.
Mientras, Amaro piensa llevar una inquietud a la mesa de discusiones de la LVBP.
“Nuestra importación no estuvo a la altura, sin despreciar el trabajo de ninguno de sus componentes porque dieron el 110 por ciento. Pero tenemos que ser más agresivos y buscaremos jugadores de trayectoria, aunque ello siempre es una moneda al aire. Para seis equipos de la liga, la cuota de tres importados representa una camisa de fuerza. Esto debe hablarse en las próximas reuniones de la LVBP. Jugar con seis importados ofrece ventaja a Tigres de Aragua y Navegantes del Magallanes, en una liga que no es para desarrollar peloteros, sino para ganar”, reflexionó Amaro, quien dejó para el final de su exposición el tema del mánager.
“Marco Davalillo se merece una entrevista entre los candidatos a dirigir la próxima campaña. Pero primero tenemos que evaluar a todo el cuerpo técnico. No descartamos que continúe como mánager. Es un motivador y creo que va a dirigir en la Liga Mayor. Esa liga ayuda a mantener en forma a muchos miembros de los ocho equipos de la LVBP. Sería una gran ventaja tener a un hombre tan sapiente como Marco, como scout de las Águilas en ese circuito”.
Yonathan Perlaza, uno de los principales prospectos de los Cachorros, apenas vio acción
29 estrenos entre las últimas campañas
Casi 30 peloteros -29 para ser exactos- han debutado en las últimas temporadas de la LVBP con el uniforme de las Águilas. Ningún otro equipo del circuito ha visto debutar a tantos novatos en sus filas. Procederemos a nombrarlos, pues ellos son los llamados a levantar el vuelo del elenco rapaz en un plazo no muy lejano. Dirijamos una mirada a esos jugadores y a su estatus
Jugadores de Posición Águilas
Debutantes:
1.- Malvin Matos Jr. (25 años)
2.- Yonathan Perlaza (23 años)
3.- Gustavo Cardozo (18 años)
4.- Andrés Chaparro (22 años)
5.- Jackson CHourio (17 años *)
6.- Simón Muzziotti (22 años)
7.- Ronaldo Urdaneta (23 años)
(*) Jugador de menor edad en la liga
Segundo año
1.- José Herrera (24 años)
2.- Kenedy Corona (21 años)
3.- Santiago Rincón (25 años)
4.- Osleivis Basabe (21 años*)
5.- Luis Alexánder Basabe (25 años)
6.- Oscar Campos (25 años)
7.- Kelvin Alarcón (22 años)
8.- Jorbit Vivas (20 años)
(*) Segunda temporada completa
Lanzadores
Debutantes
8.- Deretd Parra (21 años)
9.- Giuseppe Velásquez (18 años)
10.- Zaquiel Puentes (20 años)
11.- Maicor León (20 años)
Segundo año
9.- Carlos Betancourt (20 años)
10.- Luis Moncada (23 años)
11.- Eleardo Cabrera (26 años)
12.- José Moreno (21 años)
13.- Eiberson Castellano (20 años)
14.- Gerardo Vílchez (24 años)
15.- Angello Infante (22 años)
16.- Nomar Rojas (20 años)
17.- Manuel Rodríguez (24 años)
18.- Juliandry Higuera (27 años)
