Créditos Imagen: Gleyber Torres | Fotos: A. van Schermbeek
Rayner Rico | Prensa LVBP
Caracas.- En medio de los años entre 2000 y 2010, el Estadio Universitario contaba con un consecuente visitador, uno tan joven como para ser considerado un niño. Aquel infante acudía con regularidad al recinto a exhibir su fanatismo empedernido por el equipo Leones del Caracas y su nombre, para entonces desconocido, ahora mismo resulta más que familiar para todos los entendidos del beisbol: Gleyber David Torres.
De aquel bisoño aficionado son pocos los rasgos físicos que se conservan, naturalmente producto del proceso evolutivo del ser humano; aunque son muchas las memorias que aún se mantienen vigentes en su mente, mismas que le permitieron al ahora estelar toletero de las Grandes Ligas, llenarse de nostalgia una vez se presentó al terreno del parque de la UCV para realizar su primera práctica oficial con los melenudos, horas antes de su debut.
“Alegre por haber conseguido el permiso. Estoy súper emocionado de estar aquí y compartir con mis compañeros, ponerme este uniforme. Es un sueño hecho realidad. Voy a tratar de dar lo mejor de mí para ayudar al equipo a seguir ganando”, señaló sobrio, aunque perceptiblemente emocionado, el infielder de los Yanquis de Nueva York.
Así fue como el gran día llegó. Ese, que para la afición caraquista resultaba una utopía, o que al menos el porcentaje de posibilidades era bastante bajo, finalmente ocurrió. Torres se atavió de león y no pudo ocultar su satisfacción por estar ahora como un integrante de la LVBP y del conjunto al que siempre siguió.
“Contento de que la afición esté emocionada por mi debut. Como ellos, yo igualmente lo estoy. Espero que venga mucha gente no solo a verme a mí, sino a apoyar al equipo que está teniendo una gran temporada. Mis expectativas son altas. No tengo nervios, diría que es emoción. Son sentimientos encontrados, como desde pequeño venía al estadio siempre a ver los juegos y ahora voy a jugar. La mejor manera es disfrutarlo”, expresó.
El proceso para que Torres consumara una de sus metas profesionales no fue simple. No, después de que la histórica y famosa escuadra neoyorquina le negaran el permiso en primeras instancias, con la intención de mantener fuera de riesgo alguno a una de sus principales figuras. Pese a la negativa, no se rindió y la plana mayor encabezada por Hal Steinbrenner tuvo que ceder ante la petición de uno de sus “niños mimados”.
“Principalmente fueron mis agentes los que se encargaron de hablar, cuando ellos dijeron que no, yo tomé el atrevimiento de llamar directamente al gerente y conversar. De verdad que siempre tuve las esperanzas de que dijeran que sí, creo que esas buenas vibras dieron el resultado”, manifestó el pelotero capitalino, quien tiene previsto acompañar a Leones por 12 juegos, aunque no descarta una posible extensión del salvoconducto yanqui. “Veremos si después de cinco juegos podemos volver a llamar e ir conversando”, añadió.
Menos de tres días en el país tuvo Gleyber Torres para ponerse a disposición del cuerpo técnico melenudo. Aunque para muchos puede resultarle precipitada su inserción en el roster, tomando en cuenta la última vez en la que apareció oficialmente en un terreno, por allá a mediados de octubre, el caraqueño no escatimó en esfuerzos para preparase de manera particular y presentarse en las más óptimas condiciones con la intención de aportar a la causa caraquista lo más antes posible.
“Vengo con la meta de ayudar desde el principio. De verdad que me preparé muy bien durante mis cortas vacaciones. Trataré de dar lo mejor, yo seré un peón más el ajedrez”, describió, antes de señalar que no cuenta con ninguna imposición de los Yanquis acerca de lo que será el papel que desempeñará al mando de José Alguacil.
“Voy a jugar posición. Primero tengo que conocer un poco el estadio. También darle un día de actividad a las piernas. Aunque bueno el mánager es el que decide. Veremos día a día como me van a llevar en el lineup”, exclamó Torres, quien apareció por primera vez en los patios nacionales como bateador designado y segundo en el orden ofensivo del juego contra Tigres de Aragua, precisamente el primer club que lo firmó como profesional en Venezuela.
De hecho, de manera curiosa, el primer lanzador que le tocaría enfrentar a Torres en su carrera en la LVBP sería al veterano Guillermo Moscoso, uno de los involucrados en el cambio que lo llevó a formar parte de Leones. El otro vinculado con la transacción fue Víctor Gárate, quien ahora es uno de sus jefes como miembro de la directiva capitalina, además artífice de su inclusión en la planificación de esta temporada 2022-2023.
Gleyber Torres trabajó desde temprano con Ramón Castro, coach de bateo de Leones
“De verdad que el destino es increíble. Enfrentar a Moscoso y ver a Gárate de gerente (asesor deportivo) es como dice el dicho sobre las vueltas que da la vida. Nos hemos reído bastante de ello”, esbozó Torres, quien reconoció que otro de sus objetivos con su actual participación está en ponerse a tono para su eventual aparición en el Clásico Mundial con la Selección Nacional.
“Estar allí es otra de las metas que tengo por cumplir. Prepararnos un poquito temprano beneficia a todo el mundo. Aunque de verdad no estoy pensando en el futuro, me enfoco en el presente para dar lo mejor de mí hoy y todos los partidos que me restan para ayudar a mi equipo”, cerró.
Gleyber Torres fue el foco de atención de la prensa acreditada para cubrir a Leones