Créditos Imagen: Francisco Arcia | Foto: Alejandro van Schermbeek
Juan Aguilarte Rosales | Prensa LVBP
Miami.- Francisco Arcia estampó su rúbrica con los Yanquis de Nueva York y las Águilas del Zulia, con apenas 17 años de edad. Prácticamente, terminando su adolescencia. Una etapa, de sueños, metas y anhelos, que la mayoría de los muchachos que saltan al profesional, no logran alcanzar. El beisbol, podría ser muy cruel, pero también, especial para aquellos que consiguen mantenerse.
Arcia, que se vistió de toga y birrete al debutar en el Big Show con los Angelinos (2018), contaba con un par de anillos en la LVBP con Águilas del Zulia (2016-2017) y Cardenales de Lara (2018-2019), debió esperar un lustro para que el destino le regalara, ser campeón con los Tiburones de La Guaira, divisa que representa sus raíces, su pueblo, su familia y amigos. Justo 17 calendarios después de iniciar su andar por la pelota rentada.
“La verdad que, por segundo año, representó al equipo del lugar en donde nací y crecí. Para mí es un orgullo ser parte de los Tiburones de la Guaira. La primera temporada que estuve no se pudo conseguir el objetivo, pero la reciente zafra logramos lo que todos esperaban”, destacó el cátcher, originario Maiquetía.
Arcia llegó a la Guaira en 2022, en el traspaso en el cual los salados, se desprendieron de José “Cafecito” y Teodoro Martínez, junto a Jorgan Cavanerio.
Apenas se uniformó, para él fue todo un reto personal y profesional.
“Todos los que llegamos en cambios, lo hicimos con el hambre de entregarle a la afición lo que tanto quería. Algunos teníamos esa experiencia de haber sido campeón en el país, de jugar una final. Eso fue un punto positivo para el equipo. Sirvió para ayudar a los jóvenes y crear la familia que somos”, resaltó.
Esa mezcla de juventud con talento y experiencia, es una fórmula que para el receptor de 34 años no falla.
“Se está creando un núcleo bien bonito. Confeccionando un grupo que puede seguir aspirando al campeonato por un buen rato. No es tanto un equipo, es una familia”, reiteró.
Arcia, quien acordó nuevamente con los Tecolotes de Dos Laredos, para lo que será su cuarta campaña veraniega en México, se ha convertido en una especie de mentor, para Luis Torrens. Cuando la gerencia salada, obtuvo en el Draft al valenciano, le tendió la mano, con la misión de ponerlo al día con el grupo de lanzadores.
“De eso se trata un equipo. Debe haber unión, el slogan que tenemos en la cueva es: ‘unidos somos más’. Eso es parte del apego, de la fe que nos tenemos”, puntualizó.
Es obvio que su rol cambió considerablemente. El tiempo de juego fue muy poco. En el Cásico del Caribe, se puso los aperos para medirse a Curazao. Sin embargo, el éxito del equipo, es su felicidad.
“Tienes que aceptar tu función. Aportar en todo lo que se pueda dentro y fuera del terreno. Dar lo mejor de ti y para mí eso nos sirvió para conseguir la corona”, finalizó