Créditos Imagen: Carlos Carrasco | Foto @GenyMets
José Ángel Rodríguez | Prensa LVBP
Caracas.- Carlos Carrasco lanzó cinco entradas el viernes, en la derrota de los Mets de Nueva York 5-4 ante los Gigantes de San Francisco en el Citi Field. A pesar del sinsabor de dejar el juego con ventaja en la pizarra y terminar sin decisión, el derecho alcanzó los 1.501 innings de labor en las Grandes Ligas, una cifra que le permitió unirse a selectos grupos entre pitchers venezolanos.
Carrasco, de 36 años de edad, se convirtió en el octavo serpentinero criollo con 1.500 episodios o más en la historia de la Gran Carpa. Su nombre ahora acompaña a Félix Hernández (2729.2), Freddy García (2264.0), Johan Santana (2025.2), Aníbal Sánchez (2017.2), Carlos Zambrano (1959.0), Wilson Álvarez (1747.2) y Kelvim Escobar (1507.0).
Además, de esa reducida lista, es sólo el sexto que acumuló al menos 1.500 capítulos, 1.500 ponches (tiene 1.546) y 100 victorias (106), junto a Hernández, García, Santana, Sánchez y Zambrano, de acuerdo con Baseball-Reference.
Tras su presentación contra los californianos, Carrasco bajó su promedio de carreras limpias en la temporada de 6.19 a 5.94 al permitir sólo dos rayas en la noche, con seis guillotinados, en lo que representó su mejor salida de junio, un lapso en el que no pudo ganar en cinco aperturas (0-1 con PCL de 6.23 en 21.2 IL).
El oriundo de Barquisimeto permitió cinco hits en la velada, uno de ellos un jonrón del connacional Wilmer Flores, sin hombres en circulación en el quinto acto para igualar las acciones 2-2 hasta ese momento. Al cierre del tramo, los metropolitanos tomaron ventaja con un doble de Jeff McNeil que empujó a Brandon Nimmo desde la inicial, luego de que la jugada fuese revisada por interferencia de un aficionado, y un episodio después, Tommy Pham incrementó la diferencia con otro vuelacerca solitario.
Sin embargo, un estacazo de Patrick Bailey con dos corredores en base frente a David Robertson en el octavo capítulo, esfumó la posibilidad de que Carrasco obtuviera su tercer lauro del ruedo y dejó cifras definitivas en el compromiso.
Para el larense fue su quinta aparición consecutiva sin alzarse con la victoria, aunque fue la primera ocasión que transitó por lo menos cinco innings desde el 6 de junio, contra los Bravos de Atlanta. Su foja en la campaña continuó en 2-3, luego de 11 inicios y 53 actos.
“Todos los lanzamientos funcionaron, excepto uno: el jonrón (del ex-Met Flores). Ese fue el único con el que me perdí. Se suponía que tenía que ejecutar ese lanzamiento”, dijo Carrasco después del desafío, según el New York Post. “Físicamente, todo se sintió, en cada lanzamiento. Mi nuevo slider funcionaba muy bien”.
Ese "nuevo slider" tiene que ver con un pequeño ajuste que hizo antes del compromiso.
“Creo que fue el agarre”, apuntó el criollo. “Diferente agarre, y se sintió mucho mejor, lo que me permite tener mas confianza en el pitcheo. Fue realmente bueno esta noche".
El diestro usó 28 veces ese lanzamiento, con una velocidad promedio de casi 83 millas por hora, y con él, consiguió ponchar a tres bateadores.
El mánager Buck Showalter quedó impresionado con la actuación del veterano de 14 campañas en las Mayores.
“Me alegré por Carlos. Tuvo una salida competitiva para nosotros esta noche”, destacó Showalter. “Creo que tenía buenas rectas, control sobre el slider y el cambio también fue efectivo. Esos tres pitcheos conforman un buen repertorio. Te otorgan muchas opciones".
Carrasco perdió poco más de un mes de contienda entre el 16 de abril y el 19 de mayo por inflamación en el codo de lanzar, causada por una astilla de hueso. Recibió una inyección de cortisona el 19 de abril como una de las últimas cartas del cuerpo médico neoyorquino para evitar que pasara por el quirófano y desde entonces, continúa llevando con vaivenes el curso, tal como ha ido también para el conjunto de Queens, que arrancará la jornada del sábado con récord de 36-46, a 18.5 juegos de Atlanta, líderes de la División Este de la Liga Nacional, tras concluir junio con marca de 7-19. Sólo los Reales de Kansas City (6-20) fueron peores.