Créditos Imagen: Fotos Luis Patiño/Prensa Tigres de Aragua
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Francisco Caraballo trata de no llamar la atención. Ofrece disculpas cuando algunos periodistas que notaron su presencia intentaron abordarlo, poco antes del inicio de la práctica de los Tigres de Aragua, en el Estadio Universitario.
“Acabo de llegar, no quiero que piensen que soy un fresco y el jefe (Eduardo Pérez) me está viendo (risas). Voy a trabajar con el resto de los muchachos. Más tarde nos encontramos”.
Caraballo, de 32 años de edad, se unió a los bengalíes el martes y el manager Pérez lo alineó séptimo, como primera base, contra los Tiburones de La Guaira.
“Espero que nos ayude en la inicial y a producir carreras. Tengo muy buenas referencias de él. Cuando estaba dirigiendo a las Águilas, Alex Ramírez me habló de él. También lo hizo Ernesto Mejías, pero no se dio la oportunidad de traerlo. Ahora puedo contar con él”, reveló el piloto.
El anaquense en algún momento fue considerado prospecto de los Astros de Houston, pero fue dejado en libertad en 2008. En la LVBP comenzó su carrera con Magallanes, siguió con los Tigres y finalmente con Caribes de Anzoátegui, que después de la zafra 2012-2013 prescindió de sus servicios.
Durante ese tiempo, apenas promedió .108 (46-5) y sacó dos jonrones, en 22 desafíos. Un balance del que no podía ufanarse.
Pero luego de una pasantía por la Asociación Canadiense Americana (independiente), consiguió la oportunidad de firmar un contrato para jugar en Japón, que dio un vuelco a su carrera.
Hace tres de años se unió al Gumna Diamond de la Baseball Challenge League, el circuito independiente más importante del archipiélago. En 2014 ganó la Triple Corona, tras ligar .396 de average, con 33 jonrones y 87 remolcadas, en 63 partidos, una campaña después de explotar con 24 vuelacercas y 63 producidas.
Este año, se convirtió en toda una revelación en el Beisbol Profesional Japonés (NPB por sus siglas en inglés) con el Orix, organización con la que había estado brevemente entre 2010 y 2011.
“Un manager en Japón que me dijo ‘te vaya bien o mal, siempre da el 100 por ciento y sigue adelante’. Esa es la actitud que he asumido desde entonces. Nunca me rendí”, señaló Caraballo, que en 2015 recibió un salario de 75 mil dólares, más incentivos.
“Lamentablemente, las oportunidades nunca se dieron con Houston. Pero la constancia me ha traído hasta aquí. Agradezco mucho a mi familia por no haberse rendido conmigo y seguir dándome apoyo en esos momentos. Espero que de aquí en adelante la gente me pueda conocer en la LVBP”, puntualizó.
Caraballo fue el primera base de la selección nacional en la Premier 12
Ahora, Caraballo espera demostrar que puede rendir al nivel de la LVBP y cumplir con las expectativas de lo que ha hecho en la pelota del Sol Naciente.
“Pensé que no jugaría más beisbol en Venezuela. En Japón o Estados Unidos me ha ido mucho mejor. He estado haciendo mi trabajo y me había olvidado de la pelota de aquí”.
Freddy García, su compañero en la selección nacional que participó en la Copa Mundial Premier 12, le entusiasmó y a Caraballo le gustó la idea.
“Habló conmigo para preguntarme. Le dije que si me daban la oportunidad estaba dispuesto a volver, de cualquier forma el equipo regresaba a Venezuela después del torneo. Estando aquí, la contratación fue rápida, pues conozco a Carlos Guillén (presidente de Aragua) desde hace mucho tiempo. Eso facilitó el proceso”.
Francisco Caraballo
“Es la mejor oportunidad que se me ha presentado en Venezuela en mis 15 años como jugador profesional”.
Caraballo comenzó su carrera como jardinero, pero este año jugó en la inicial, casi a tiempo completo. Los Tigres han visto desfilar por esa posición a Alex Núñez, Luis Ugueto y, más recientemente, a O’Koyea Dickson. El prospecto Renato Núñez era una opción a corto plazo, pero una molestia en la espalda ha puesto a pensar a los Atléticos de Oakland en la posibilidad de no darle permiso para uniformarse. Así que Caraballo, es la principal apuesta de Pérez.
El bateador derecho viene de exhibir una línea ofensiva de .252/.316/.455, con 12 jonrones y 35 remolcadas, en 64 desafíos, en la Liga del Pacífico de la NPB.
“No estoy pensando en sus jonrones, tiene la capacidad para remolcar carreras y eso es lo que necesitamos”, enfatizó el mandamás de los Tigres.
En las dos más recientes temporadas del circuito local, otros peloteros han estado en la misma posición de Caraballo. El relevista Edison Barrios fue clave en un momento de la 2014-2015 para los Tiburones de La Guaira. El zurdo Robert Zárate emergió en la segunda mitad de ese torneo y ahora forma parte de la rotación de Aragua. Ambos militaron en Japón, antes de brillar en la LVBP.
“Es la mejor oportunidad que se me ha presentado en Venezuela en mis 15 años como jugador profesional”, destacó Caraballo. “Nunca había llegado a un equipo, avanzada la temporada, a jugar de una vez. Estoy muy motivado. Trataré de dar el 100 por ciento de mí y que sea lo que Dios quiera”.
