Créditos Imagen: Bryant Flete | Fotos: Carlos Castro
José Luis López | Prensa LVBP
Caracas.- Mucho se ha hablado del cuerpo de relevistas de Águilas del Zulia, catalogado como uno de los mejores del campeonato. Concepto que se antoja incongruente con la actuación observada por el equipo, colocado en la zona de peligro de la tabla de posiciones.
La razón de que Zulia no haya tenido una mejor actuación, habida cuenta de su pitcheo, es la anémica ofensiva del club, la cual apenas supera los .240 puntos, ubicada como la más débil del torneo.
Curiosamente, a lo largo del torneo, hay un jugador que no se ha contagiado de ese virus que impide a los toleteros de Águilas, levantar su vuelo ofensivo. Nos referimos a Bryant Flete, infielder y eventual jardinero, que al momento de redactar estas líneas batea para .356 puntos, metido entre los diez mejores a la ofensiva en el torneo.
El importado Flete
Bryant Flete tenía tres temporadas sin jugar en Venezuela. Durante ese tiempo, el joven se dedicó a arreglar su estatus de residente en Estados Unidos. Resuelto el papeleo de rigor, ya podía volver a jugar en la LVBP.
Cuando dio sus primeros pasos con Águilas, los parciales del club se preguntaban de dónde había salido “ese importado”.
Con aquel nombre y su respectivo apellido, resultaba muy difícil suponer que este jugador era falconiano de pura cepa.
En esta temporada, sin hacer mucho ruido, ha mostrado sus avances. Tal vez en principio no se pensaba que sería un pelotero de a diario. Pero la diosa fortuna metió la mano, con la lamentable lesión de un compañero convertida en catalizadora.
En las primeras de cambio, apenas en el albor de la segunda semana de torneo, el intermedista Carlos Herrera -quien parecía tener a resguardo el cuido de la posición- se lesionó una pierna y debió estar casi un mes como mero espectador.
En ese lapso, Bryant entró a la alineación zuliana y a batazo limpio quedó adherido a ella. Generalmente como un noveno bate, realmente engañoso, dado su alto promedio.
“No me importa en cual lugar de la alineación estoy. Puedo ser primero, segundo o noveno bate, pues me siento cómodo en esos lugares del orden ofensivo. Soy un bateador de habilidad. Me gusta tocar la bola, mover corredores. Tal vez el segundo puesto en el line up sea el que mejor me venga, por tener tales características. Pero en esos tres lugares hago mejor mi trabajo”, confesó al circuito radial del conjunto zuliano.
La clave del éxito
De inmediato, Flete habló sobre las razones que le han convertido en un exitoso bateador esta temporada.
“El enfoque y la paciencia han sido fundamentales. Me he concentrado en buscar pitcheos del medio del plato hacia afuera para irme hacia la banda contrario. He escuchado muy bien a los entrenadores de bateo que he tenido, quienes han insistido en que la clave está en saber seleccionar un buen pitcheo. Como suelen lanzarme hacia afuera, hacia esa zona va mi bate", indica el jugador, con loable facilidad de palabra.
En cuanto a su defensa, Bryant Flete la cultiva a diario.
“Trabajo duro y día a día en la defensa. En Estados Unidos suelo entrenar acompañado por Argenis Díaz, ex jugador de la LVBP que me ha ayudado en mis progresos. Tengo la virtud de no jugar una sola posición. Aparte de la segunda base, puedo defender con igual solvencia la antesala y el campocorto. También me muevo bien en los jardines. Cuando el equipo toma prácticas de bateo, suelo colocarme en esa parte del terreno para tomar los elevados. Por ello, estoy listo para defender la posición donde el mánager quiera ponerme", expone Bryant y le asiste la razón. Esta semana, con el regreso de Carlos Herrera a la acción, Fue colocado como antesalista y jardinero izquierdo, posiciones en las cuales observó buen rendimiento.
“En mi vestuario tengo tres guantes: uno pequeño para cubrir la intermedia y el campocorto. Otro que es un poquito más grande para jugar en tercera base. Y también tengo otro de mayor tamaño para defender los jardines. Ellos son mis compañeros de brega”, apunta sin disimular cierto orgullo.
Bryant Flete puede jugar con solvencia en todas la posiciones del infield y no le temo moverse a los jardines
Madurez
Bryant Flete es como una esponja que a cada momento quiere aprender más y más sobre los secretos del beisbol.
“Estoy abierto a cualquier observación. Volver a la LVBP ha sido un gran reto, pues en mis tres años de ausencia, muchos jugadores nuevos entraron a escena y otros que ya conocía mejoraron en su desempeño. Por este motivo, constantemente pregunto en el dugout cómo jugar ante tal o cual bateador y cómo hacer daño a tal o cual lanzador. Esta temporada ha sido de mucho aprendizaje para mí”, expresa con humildad.
Para cerrar su conversación con el circuito aguilucho, el productivo jugador habla sobre el equipo.
“Estamos unidos, somos una familia y haremos todo lo posible para que Águilas juegue en enero”, aseguró a modo de despedida.