Créditos Imagen: Brusdar Graterol Foto: MLB.com
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Brusdar Graterol retiró a los tres hombres que enfrentó en el octavo inning del tercer juego de la Serie Mundial y se convirtió apenas en el segundo venezolano que aparece en el Clásico de Otoño con el uniforme de los Dodgers de Los Ángeles.
El primero fue Víctor Davalillo, una leyenda del beisbol en el país, que lo hizo en las temporadas de 1977 y 1978.
Ambos transitaron recorridos muy diferentes para llegar a esa posición.
Graterol, de 22 años de edad, llegó a Los Ángeles proveniente de los Mellizos de Minnesota en el cambio por el japonés Kenta Maeda, como un cotizado prospecto, con apenas 10 presentaciones en la temporada regular y una entrada en postemporada.
Davalillo lo hizo con 37 años de edad, luego de estar tres años fuera de las Grandes Ligas y tras conseguir un segundo aire en su carrera en México, donde demostró su extraordinaria capacidad con el madero y despertó el interés de los Dodgers, que compraron su contrato de los Rieleros de Aguas Calientes para sumar un bate zurdo de experiencia en la recta final de la campaña regular.
Davalillo había impuesto una marca de hits como bateador emergente en 1970 (que eventualmente fue rota) en la Liga Nacional y fue visto como un complemento ideal para salir desde la banca a tomar turnos importantes, junto con el toletero derecho dominicano Manny Mota.
Con esa función disputó las Series Mundiales de 1977 y 1978, aunque Los Ángeles no pudo prevalecer y perdió con los Yanquis de Nueva York en esas dos campañas. Vitico exhibió una línea ofensiva de .333/.333/.333 (de 6-2), con una empujada en cinco encuentros.
Antes, había formado parte de los Piratas de Pittsburgh y los Atléticos de Oakland, en sus versiones de 1971 y 1973, que terminaron con el título de las Mayores.
Graterol, todavía con estatus de novato, podría conseguir su primer anillo de campeón en 2020.
En su estreno en una Serie Mundial, el derecho apenas usó siete pitcheos, cinco de ellos en la zona de strike, para dominar en fila a Willy Adames, Kevin Kiermaier y Yoshi Tsutsugo, en el triunfo 6-2 de los Dodgers contra los Rays de Tampa Bay.
TODO UN LANZALLAMAS
Brusdar Graterol se ha destacado por sus envíos a más de 100 millas por hora y el lanzallamas venezolano estuvo particularmente encendido en su primera presentación en la Serie Mundial.
De su total de siete pitcheos, seis fueron de al menos 100 mph, destacó David Venn, en un trabajo para LasMayores.com.
Dos de esos lanzamientos fueron de 102 mph, “la segunda mayor velocidad de un envío en un partido de Serie Mundial desde que Statcast empezó a rastrear tales métricas en el 2015. El récord le pertenece al zurdo cubano Aroldis Chapman, quien alcanzó las 103.2 mph por los Cachorros contra los Indios en el Clásico de Otoño del 2016”, reseñó Venn.
