Créditos Imagen: Foto: Luis Patiño/ Prensa Tigres de Aragua
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Austin Bibens Dirkx está ansioso por comenzar a la lanzar con los Tigres de Aragua, su nuevo equipo en la LVBP, luego de reforzar durante cuatro campañas a las Águilas del Zulia.
“Estaré listo lo más pronto posible”, dijo el derecho, que se incorporó el viernes a las prácticas aragüeñas, al portal del equipo. “Estuve entrenándome por mi cuenta. Solamente paré por un par de días en mi regreso a casa”.
A principios de semana, antes de viajar al país, lanzó tres episodios contra un equipo universitario “cerca” de donde vive. “Mi brazo está bastante bien ahora mismo, así que estoy listo para lanzar cuando me lo pidan”.
El cuerpo técnico felino todavía no ha anunciado su rotación, ni al pitcher que tomará la pelota el Día Inaugural, contra los Navegantes del Magallanes, pero Bibens-Dirkx está dispuesto a dar un paso al frente.
“Si me lo piden, es posible hacerlo”, señaló.
Bibens-Dirkx vistió el uniforme del Zulia entre las campañas 2010-2011 y 2013-2014, lapso en el que dejó balance de 12-7, con 2.24 de efectividad, en 176.2 innings, repartidos en 36 salidas, 32 de ellas como abridor.
En esos cuatro años, el estadounidense dejó el mejor promedio de carreras limpias en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, entre los lanzadores con al menos 170 entradas trabajadas.
La gerencia de Aragua lo contrató por esas credenciales y espera ver en el terreno a un tirador tan dominante como en su primera etapa en Venezuela. Algo de lo que está consciente el importado.
“En el beisbol invernal todo se trata de ganar o irse a casa. Así que sí siento un poco de presión”, confesó. “Afortunadamente conozco muy bien la liga, así que espero aplicar esos conocimientos y hacer un buen trabajo este año”.
Durante el verano boreal, Bibens-Dirkx lanzó para los equipos New Hampshire (AA) y Buffalo (AAA), filiales de los Azulejos de Toronto, y se combinó para balance de 7-9, con 4.17 de efectividad, en 114.1 capítulos. Pero llega a Maracay sin contrato, por lo que espera aprovechar la vitrina de la LVBP.
“Es un gran lugar para exhibirse, donde enfrentas a muchos y buenos bateadores. Tengo la esperanza de poder capitalizar, hacerlo bien y conseguir trabajo para 2016”.
Mientras cumple sus metas y ayuda a los Tigres, el lanzador, de 30 años de edad, espera disfrutar del calor de los aficionados, como lo hizo en sus campañas anteriores.
“Estoy emocionado. Siempre le cuento a la gente (en Estados Unidos) cómo es jugar en la pelota invernal, especialmente en Venezuela, lo increíble que es el público y el buen nivel de la pelota. Siempre es emocionante volver”.