Créditos Imagen: Guillermo Moscoso Foto: José R. González
Joseph Ñambre | Prensa LVBP
Caracas.- Si de algo adoleció hasta ahora Tigres de Aragua es de un sólido pitcheo, pues el equipo ostentaba el peor récord (1-8) de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) debido, en gran medida, a que su staff de lanzadores había sido castigado en el inicio de la temporada 2022-2023.
Aragua, que tenía previsto jugar el viernes contra Navegantes del Magallanes en Valencia, exhibía la efectividad más alta (7.80) del incipiente torneo, tras admitir 63 carreras limpias en 72.2 innings, algo que limita sus opciones clasificatorias a la segunda fase y lo obligaba a requerir de la ayuda de lanzadores con calidad comprobada para salir del slump.
Esta semana Tigres recibió una buena noticia porque el experimentado abridor Guillermo Moscoso se unió al club y le confesó al departamento de prensa del elenco que tiene la firme intención de ayudar al cuadro a abandonar el sótano de la tabla.
“Creo que tenemos un equipo blindado y vamos a salir adelante”, aseveró el viernes el abridor, de 38 años que se acreditó el premio José “Carrao” Bracho en la campaña 2017-2018 después de dejar una foja de 5-2 y una efectividad de 2.05 en 14 salidas con los bengalíes. “Sé que cumpliremos el objetivo (pasar al Round Robin) porque veo que hay más unión (entre sus cofrades) y eso se notó en el campo”.
Las palabras del maracayero, que cumplirá 39 primaveras el 14 de noviembre y tiene previsto debutar el próximo martes contra Leones en Caracas, no carecen de asidero porque durante este septenario su escuadra mostró signos de mejoría en materia monticular.
El miércoles, el conjunto rayado blanqueó 3-0 a Magallanes en el campo José Pérez Colmenares de Maracay y el jueves dominaba 2-0 a Leones del Caracas antes de que la lluvia interrumpiera las acciones en el tercer inning.
Para el derecho, ese desempeño reciente de los escopeteros es el resultado de trabajar con un ex grandeliga como Wilson Ramos, receptor que a su juicio sabe solicitar los envíos ideales para neutralizar oponentes peligrosos de la LVBP. Por eso no dudó un instante en elogiar al máscara que estuvo detrás del plato en los topes contra filibusteros y melenudos.
“Se vio la diferencia (del desempeño de los pitchers) cuando Wilson (Ramos) estuvo detrás del plato y eso es positivo. Los Tigres de Aragua que vieron al principio (que perdieron ocho veces seguidas) es totalmente contrario a lo que observarán desde ahora, porque el equipo va a salir a dar el 100%”, comentó el diestro que en la MLB ostentó una foja vitalicia de 13-14 con un porcentaje de rayitas pulcras de 4.28 en 70 apariciones -26 como iniciador- realizadas en cinco citas con Rangers de Texas, Rockies de Colorado, Atléticos de Oakland y Gigantes de San Francisco.
Contar con Moscoso podría ser determinante para Tigres en el resto del curso, que desde el jueves es dirigido por Wilfredo Romero, pues demostró ser una especie de “caballo de batalla” para la organización del centro del país.
Según PelotaBinaria, disputó cinco de sus 11 torneos de la LVBP con Aragua (tras actuar en los primeros seis con Leones) y en ellos lució una marca de 13-8 con una media de anotaciones merecidas de 2.75. En 44 comienzos, lanzó 212.2 entradas, toleró 65 carreras sin suciedad, otorgó 54 bases por bolas y propinó 134 ponchetes. Su WHIP fue de 1.185.
Está consciente de su rol de líder dentro del clubhouse de la manada y por ese motivo instó a los jóvenes beisbolistas a aprender a acoplarse como combinado para cumplir la meta trazada por la directiva de la novena, encabezada por el presidente Víctor Zambrano, que es conquistar el undécimo cetro en la historia de la franquicia.
“Mi responsabilidad es el pitcheo, al igual que la de otros serpentineros veteranos. Espero que los peloteros jóvenes empiecen a entender la importancia de que en un campeonato tan breve (como el de la LVBP) hay que ajustar rápido (…) Esta no es una temporada en la que un pitcher deba aguantar dos o tres semanas para agarrar el ritmo, porque es muy corta. El beisbolista que está aquí es el que está acostumbrado a dar 100% desde el primer día y hay que tratar de hacer los ajustes lo más rápido posible (para encaminarse al éxito)”.
Moscoso, uno de 30 monticulistas que acumularon al menos 283 guillotinados, 26 triunfos y lucieron una efectividad de 3.11 en los anales de la LVBP, desea que Aragua encadene una serie de lauros para trepar posiciones en el standing y alejar los “fantasmas” de una temprana eliminación.
A su entender, esa cadena positiva sólo se concretará cuando cada miembro del club sepa que debe subir su nivel a corto plazo, porque en los certámenes invernales hay poco margen para el error.
“No estamos buscando la perfección, pero tenemos que ajustarnos rápido para ser un poco más competitivos”, señaló el maracayero que con Caracas acabó con un saldo de 13-7 y un PCL de 3.55 en 71 cotejos de los cuales empezó 24. Consiguió tres salvados.
Antes de finalizar el diálogo con la gerencia de comunicaciones de Tigres, Moscoso tuvo palabras de elogio para Romero, piloto que asumió el reto de manejar a los felinos después de que mostraron su peor versión bajo el mando de Jackson Melián, capataz que fue despedido por la gerencia selvática tras presentar un récord de 0-7. Luis “Machete” Rodríguez lo suplió de forma temporal y concluyó con una marca de 1-1 al frente de Aragua.
Moscoso espera que Romero, quien guio a Magallanes a titularse en la zafra anterior y recientemente fue cesanteado por Yaquis de Ciudad Obregón de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP) por malos resultados, pueda hallar la fórmula para que Tigres sea exitoso. Reconoció que Romero es un trabajador incansable.
“Por múltiples referencias, sé que Wilfredo (Romero) es un mánager que le da mucha confianza a los peloteros y mantiene buena comunicación (con ellos). Lo conocí como pelotero cuando jugamos para Leones del Caracas, pero nunca lo tuve como coach, aunque lo he enfrentado en todos los años que lleva como instructor. Creo que es un buen dirigente”.
El Dato
Guillermo Moscoso es uno de los seis lanzadores activos que alcanzaron un mínimo de 26 triunfos en la LVBP. Esta estadística es liderada por Raúl Rivero (Cardenales de Lara) con 46 lauros, seguido por Néstor Molina (Cardenales) con 40. Moscoso suma 26 victorias y comparte la tercera posición de la estadística con Jean Toledo (Caribes de Anzoátegui), Omar Bencomo Jr. (Caribes) y Rafael Cova (Tiburones de La Guaira).
