Créditos Imagen: Francisco Álvarez | Foto: Elio J. Miranda
José Ángel Rodríguez | Prensa LVBP
Valencia.- Un integrante de la oficina de Navegantes del Magallanes se acercó a un miembro del departamento de prensa del club durante la previa al primer duelo contra Leones del Caracas, en el Round Robin 2022-2023. “Francisco Álvarez va a tomar una práctica de bateo por primera vez con el equipo, es el prospecto número uno del beisbol, tómenle fotos, si pueden”, le dijo.
El detalle fue que, Álvarez, quien debutó en 2022 con los Mets de Nueva York como la mayor promesa del deporte, de acuerdo a MLBPipeline, ya había culminado su rutina con el primer grupo de bateadores de la galera, y desde entonces se dispuso a entablar una conversación con el mánager Yadier Molina, que se extendió por más de 20 minutos alrededor de la segunda base del Estadio José Bernardo Pérez de Valencia.
“Le hice varias preguntas sobre qué tan difícil es llevar un juego en Grandes Ligas. Qué tan complicado es quechar a ese nivel, porque él es un (futuro) Salón de la Fama y para mí es un ejemplo e ídolo” reveló Álvarez, a quien los metropolitanos siguen viendo como cátcher, a pesar de no ser su principal fortaleza sobre el terreno.
Molina, es el segundo receptor con mayor cantidad de juegos disputados en la historia de la Gran Carpa, con 2.184. Además, fue convocado en 10 oportunidades al Juego de Estrellas, obtuvo nueve Guantes de Oro y ganó dos Series Mundiales en una carrera de 19 temporadas, todas con Cardenales de San Luis.
“Fue un placer hacerle preguntas y que me respondiera, hablar en confianza con él”, admitió el joven de 21 años de edad, que tiene como objetivo defensivo mejorar su mecánica de lanzamiento a las bases y el llamado del juego.
En el meteórico 2022, que inició en Doble A, le llevó por Triple A y terminó en el Big Show, Álvarez cometió nueve errores en los 81 desafíos que disputó detrás del plato. Una cifra que demostró desarrollo en relación a las 12 pifias cometidas en 59 compromisos durante 2021, pero aún con margen de mejora.
“Fue una montaña rusa la temporada”, admitió el originario de Guatire, estado Miranda. “Es un orgullo ser el principal prospecto del beisbol, y eso se ha dado con trabajo fuerte. A veces, las emociones son un poco incontrolables”.
Álvarez fue el último de los 25 venezolanos que se estrenó como ligamayorista en el pasado certamen, siendo un nuevo récord para el país, al superar los 20 del año 2014. Debutó como séptimo bate y designado en la decisiva serie contra Bravos de Atlanta en el Truist Park, por la cima de la División Este de la Liga Nacional.
Fue el premio para el mirandino, luego de una brillante temporada con el madero en Ligas Menores, tras conectar 49 extrabases (27 dobles y 22 jonrones), con 78 carreras empujadas y OPS de .885, en 112 careos, números que le ayudaron a ser convocado a su segundo Juego de Estrellas del Futuro, de manera consecutiva.
CON LA NAVE, LA PRÓXIMA TEMPORADA
Álvarez fue operado en octubre para reparar un cartílago en el tobillo derecho, situación que descartó la posibilidad de jugar con Magallanes por primera vez en el presente campeonato. Ya astillas de hueso en la zona afectada le habían hecho perderse alrededor de dos semanas y media de acción entre finales de agosto e inicios de septiembre.
“Había muchas posibilidades de uniformarme antes de la operación. De hecho, yo llamé a Luis (Blasini, gerente deportivo) y le dije que, si había chance, antes de la cirugía quería debutar. Quiero que mi familia me vea, mis abuelos, mi papá. Pero pasó lo del tobillo, lastimosamente son cosas que vienen en el camino, con el favor de Dios hay tiempo y la próxima temporada espero debutar”, explicó el prospecto, que deberá terminar el proceso de rehabilitación en Estados Unidos durante las próximas semanas.
Por lo pronto, la novel luminaria tiene la vista puesta en obtener un lugar en el multimillonario roster del equipo grande de los Mets, para 2023. Un logro que, considera, puede conseguir con un buen rendimiento en los Entrenamientos Primaverales.
“Lo principal es estar al 100 por ciento de la recuperación del tobillo”, aclaró sobre los objetivos inmediatos. “A partir de allí, llegar al Spring Training y ganarme mi puesto. Mi expectativa es ganar una Serie Mundial con los Mets de Nueva York”.