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Eduardo Acosta | Prensa LVBP
Puerto La Cruz.- Rouglas Odor asumió esta semana la dirección de Caribes de Anzoátegui, tras la suspensión de siete partidos que le impuso la LVBP al manager Omar López, por el incidente del pasado 6 de enero con el umpire Luis González.
Odor, coach de banca, asume su interinato con un dejo de tristeza, pero también con firmeza. Sobre sus hombros descansa el enorme compromiso de guiar a los aborígenes hasta la Serie Final.
“Cada partido se lo dedicamos a Omar”, dijo el marabino, de 47 años de edad.
Hasta ahora, no ha defraudado al estratega valenciano. La Tribu ganó dos de tres encuentros, luego dividir en el inicio de la semifinal en el Estadio José Bernardo Pérez. Ahora, el equipo regresa a Valencia, con el objetivo de ganar uno de los dos juegos posibles contra Magallanes para acceder por tercer año seguido al Clásico de Enero.
“No es sencillo. Es una gran responsabilidad con el equipo, la directiva y los aficionados. Lo asumo con seriedad. Omar (López) no estará con nosotros a tiempo completo mientras cumple su sanción. Son situaciones que escapan de nuestras manos y no podemos hacer más nada salvo ganar”, indicó Odor.
No es una situación extraña para el experimentado técnico, que entre 2002 y 2008 fue manager en las filiales de los Indios de Cleveland. En 469 encuentros sus equipos dejaron balance de 225-244 (.480). Aunque, lo primordial para Odor es conocer a cada uno de los peloteros en el roster activo de Anzoátegui.
“Formar parte del equipo durante los últimos cuatro años, hace que las cosas sean más sencillas y flexibles para todos, jugadores y técnicos. Si se tratara de mi primera semana con Caribes, sería otra cosa. Pero conozco a todos muy bien, desde hace mucho tiempo, y no es la primera vez que tengo este tipo de responsabilidad. Aunque nunca se había presentado en la postemporada. De igual forma estoy tranquilo”, puntualizó.
Caribes no ha lucido diferente bajo la égida de Odor. Luego de la peor derrota de equipo alguno en una semifinal, tras caer 19-0 contra Magallanes, la Tribu mostró su acostumbrado carácter para remontar un marcador adverso de 5-0, el domingo, y ganar un emotivo encuentro, que le tiene a un paso del objetivo que se planteó en septiembre, cuando inició sus prácticas.
“Los muchachos se merecían una victoria como esa. En la tarde nos reunimos con Omar (López). Nos dijo que hiciéramos borrón y cuenta nueva, y así fue. Fuimos capaces de recuperarnos, ganamos dos de tres encuentros en casa. Ahora nos toca buscar el que nos lleve a la Gran Final”.
CONFIANZA PLENA
López, que solo puede estar presente durante las prácticas de los aborígenes, no duda en la capacidad de Odor para llevar a Caribes a la Final.
“Claro que confío en Rouglas, de lo contrario no sería mi mano derecha, mi mejor amigo. Su conocimiento de beisbol es amplio. Mi crecimiento como manager ha sido gracias a él. Es un pilar fundamental, que cubre un porcentaje muy importante del juego diario, tanto mío como del equipo”, destacó el estratega.
“Nadie puede sentirse peor que yo en el clubhouse, pero hay que seguir adelante. Es un enorme aprendizaje para controlarme en ciertas situaciones y no reincidir en el futuro. Primera vez que atravieso por una situación como esta. Reconozco y asumo esta responsabilidad, tanto a Luis González como al gremio de umpires les ofrecí disculpas, pues manché su reputación y al espectáculo”, agregó López.