Créditos Imagen: Luis Arráez | Foto: MLB.com
Alexander Mendoza | Prensa LVBP
Caracas.- Luis Arráez extendió el lunes por la noche su tórrida racha, en medio del superlativo inicio de temporada por el que atraviesa. El toletero zurdo consiguió tres hits, incluido un doble, y remolcó dos carreras, en el triunfo de los Marlins de Miami 9-6 contra los Reales de Kansas City, en el LoanDepot Park.
Con su actuación, el toletero zurdo se convirtió apenas en el quinto venezolano que reúne 10 hits y produce al menos ocho anotaciones, en un lapso de tres partidos, de acuerdo con Baseball-Reference. Los otros son Willson Contreras (2018, de 15-10, 3 HR, 11 CI), Melvin Mora (2008, de 13-10, 3 HR, 10 CI), Avisail García (2017, de 14-10, 1 HR, 8 CI) y David Peralta (2015, de 14-10, 1 HR, 8 CI).
“No lo sabía, espero tener salud para seguir haciéndolo bien”, le dijo Arráez a Pascual Artiles, después del encuentro, en el clubhouse de los peces.
En los últimos 50 años, Arráez es junto al miembro del Salón de la Fama George Brett, que lo hizo para los Reales en agosto de 1990, los únicos toleteros que ha registrado 10 imparables y remolcado a ocho compañeros, en un periodo de tres juegos, sin conectar siquiera un jonrón, de acuerdo con ESPN Stats & Info.
Los tres incogibles del criollo elevaron su promedio a .399 -152 puntos porcentuales por encima de la media de las Grandes Ligas-, lo que representa el séptimo average más alto en la era de la expansión (1961) en los primeros 61 encuentros de un equipo, para peloteros con el mínimo de apariciones legales, informó la analista Sarah Langs.
Según el estudio, Arráez amaneció este martes, solo detrás de Roberto Alomar (.399 en 1996), que está por encima del yaracuyano por un decimal, Tony Gwynn (.405 en 1997), Rod Carew (.411 en 1983), Paul O’Neill (.411 en 1994), Larry Walker (.416 en 1997) y Chipper Jones (.418 en 2008).
“Grande, ya que he trabajado duro para esto”, soltó Arráez, cuando le preguntaron sobre su promedio. “Apenas es junio, pero estoy contento de los resultados, seguiré trabajando como el primer día, no quiero conformarme. No necesito cambiar nada, solo necesito poner la bola en juego”.
El excelso paleador destacó que la clave ha sido la “buena energía” y “trabajar extra”. “Después de ver una película en Nexflix, antes de dormir veo los videos para analizar a los pitchers”, agregó.
El último bateador que exhibió un average de .400 al concluir una campaña, fue el inmortal Ted Williams, en 1941, con los Medias Rojas de Boston. Arráez está consciente que estará en el lente de las cámaras mientras coquetee con ese guarismo.
“En la pantalla siempre ponen mis números… Si dios me la oportunidad de batear .400, lo agarro. Pero lo importante es que el equipo gane. Mientras batee, el equipo va a tener la oportunidad de ganar… Es difícil jugar pelota, pero si sales a guerrear y tienes en la mente conectar tres hits, las cosas salen bien”.
Arráez busca convertirse en el primer grandeliga que consigue títulos de bateo consecutivos en diferentes ligas. En este instante mantiene una ventaja 68 puntos por encima de Freddie Freeman (.331) y Ronald Acuña Jr. (.331), en la Liga Naciona. Aunque no es algo que le preocupe en exceso. Reiteró que se enfoca en ayudar a su club.
Miami ha ganado cuatro desafíos seguidos y ostenta récord de 11-9 en sus más recientes 20 encuentros, lo que le tiene en zona de comodines y a tres partidos de los Bravos de Atlanta, puntero del este del viejo circuito.
“Me estoy divirtiendo, porque nadie creía en los Marlins. Estamos jugando buena pelota. Si nos hacen cinco carreras en el primer inning, no bajamos la cabeza”.
EN CIFRAS
Luis Arráez exhibe una astronómica línea ofensiva de .769/.786/1.077 (de 13-10), con tres anotadas, cuatro dobles, ocho remolcadas, un boleto y 1.863 de OPS, en sus últimos tres juegos.
