Valencia.- Eliézer Alfonzo Jr. solía acompañar a Eliézer Alfonzo Sr., durante las dos temporadas que su padre jugó con Navegantes del Magallanes. Para aquel entonces, el hijo era un aprendiz de receptor y slugger, que apenas contaba entre 12 y 13 años de edad.
Fonzy Jr. presenció como su papá formó parte del equipo bicampeón en las campañas 2012-2013 y 2013-2014, fijó un récord de franquicia entre criollos con jonrones en una zafra (con 16, en la 2012-2013, luego igualado por Mario Lissón y recientemente superado por Renato Núñez), y se convirtió en el segundo jugador en la historia de la LVBP con 100 vuelacercas o más.
El tiempo transcurrió, el vástago creció y comenzó a escribir su propia hoja de vida en el circuito, donde debutó la contienda anterior, con Leones del Caracas. No obstante, el destino les tenía preparada una sorpresa como las que suele dar el beisbol, tan impredecible.
Eliézer Alfonzo Jr. fue cambiado al Buque menos de un mes después del inicio del certamen 2024-2025. Pudo disfrutar poco tiempo con su progenitor, que esta refriega cumple funciones como coach de bateo en la manada capitalina, pero se unió a él en la eternidad.
El 26 de noviembre, ante Luis Torres de Bravos, en el mismo Estadio José Bernardo Pérez donde vio sacudir 26 vuelacercas a su padre con el uniforme bucanero, Fonzy Jr. inscribió los nombres de ambos junto a los de Alex y Ramón Cabrera y Carlos Café y José Cafecito Martínez, como las únicas tres parejas padre e hijo con Grand Slam en la LVBP, de acuerdo con los registros del periodista e investigador Tony Flores.
“Me llena de mucho orgullo y emoción”, admitió. “Desde que me enteré que había sido cambiado a este equipo lo asumí como un reto”.
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— BeisbolPlay (@beisbolplaycom) November 27, 2024
Cortesía: 1Baseball
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POCOS EN LA NAVE
Cuando el cátcher de 25 años de edad se estrenó con el navío el 1° de noviembre, contra Tiburones de La Guaira, también pasó a formar parte de un selecto club en compañía de “El Matatán”, como la quinta pareja dupla padre e hijo que juega en la divisa.
Los Alfonzo se unieron a Eduardo (1964-1965) y Eddy Díaz (de 1990-1991 a 2005-2006), Concepción (1967-1968 a 1971-1972) y Félix Escalona (1998-1999 a 2004-2005), Henry Centeno (1992-1993 a 1993-1994) y Misael Urbina (2022-2023) y Raúl (1992-1993 a 1994-1995) y Tucupita Marcano (2024-2025), según los archivos de Flores.
“Mi padre tuvo un pasado muy bueno en esta organización”, recordó Eliézer Alfonzo Jr. “Ahora, tener la responsabilidad de vestir este uniforme me motiva a llevarle muchas alegrías a la fanaticada, como él lo hizo”.
Y desde la otra acera, Eliézer papá, disfruta los primeros, pero firmes pasos del joven.
“Me causa mucha emoción como padre ver lo que está haciendo Eliézer Alfonzo Jr.” reveló Alfonzo Sr. a Magallanes TV. “Cada noche cuando lo llamo y me dice que dio cuadrangular, me emociona. Sólo le pido que siga trabajando duro”.
PUNTO DE INFLEXIÓN
Fonzy Jr. amaneció el viernes con línea ofensiva de .337/.430/.512 con la Carabela, luego de 25 encuentros. Mucho mejor que los promedios de .222/.290/.370 en los siete compromisos que disputó en el certamen con Leones.
“La ofensiva es visible. Pero a la defensiva también ha estado muy bien llamando juegos. Para mí es un líder. Estoy muy contento con su trabajo”, valoró el mánager Eduardo Pérez. “Tenemos récord positivo cuando él está en la receptoría”.
El análisis del piloto tiene asidero en la foja de 13-10 que exhibía el club cuando Eliézer Alfonzo hijo ha estado detrás del plato, hasta antes del último duelo de la ronda eliminatoria contra el Caracas. Juegos, además, en que los pitchers tienen efectividad de 4.91, mejor que la media de la liga (5.10).
“En la receptoría me gusta mucho enfocarme en el estudio del equipo rival para siempre tener un plan de juego. La comunicación que tengo con el coach de pitcheo Darwin Marrero y con los lanzadores es fundamental. Eso es lo que nos ha ayudado a tener el éxito que hemos tenido”, precisó el prospecto de los Tigres de Detroit. “Ramón Hernández también ha sido muy importante tanto a la defensiva, como a la ofensiva. Es una ventaja contar con personas como ellos, además de Eduardo Pérez, Clemente Álvarez y Robinson Chirinos, quienes fueron receptores y tienen mucha experiencia, porque se puede aprender mucho”.
CONFIANZA ES LA CLAVE
Padre e hijo instauraron una rutina durante el tiempo que compartieron en Leones, que el jugador ha intentando continuar desde su llegada al conjunto filibustero.
“Trabajamos mucho en ese mes que estuvimos juntos en Leones, antes de que lo cambiaran. Pero siempre le recuerdo que mantenga esa rutina que fijamos desde que llegó de Estados Unidos”.
Y le ha dado resultado, a juicio del careta, porque ha podido actuar con mayor frecuencia en la Nave, a diferencia del comienzo de temporada en el Caracas, donde era alternado con Gabriel Lino.
“Lo que más me ayudó fue la confianza que me dio el mánager y todo el cuerpo técnico desde el primer día que llegué acá”, admitió Eliézer Alfonzo Jr. “El tiempo de juego que me han dado he intentado aprovecharlo. Vengo todos los días temprano al terreno de juego a trabajar, porque disfruto hacerlo”.
