Caracas.- Ronald Acuña Jr. conectó cuatro hits, incluidos dos dobles, en sus primeros 11 turnos de la postemporada. Fue el mejor bateador de los Bravos en la Serie de Comodín de la Liga Nacional, pero a partir de ese instante y hasta el final de la Serie de Campeonato contra los Dodgers de Los Ángeles, apenas ligó de 35-6 (.171).

“Jugó golpeado, pero fue lo suficientemente bueno para no correr el riesgo de que empeorara el dolor, hasta que pudiera descansar durante el receso de temporada”, comentó el martes el gerente general de Atlanta, Alex Anthopoulos, en una conversación con David O’Brien, que cubre a los Bravos para The Athletic.

Poco después de la barrida contra los Rojos de Cincinnati, en la primera ronda de los playoffs, el estelar jardinero admitió que había estado actuando con molestias en la muñeca izquierda y aseguró que no pensaba parar.

“El dolor sigue ahí. Para que se vaya debe terminar la temporada (y descansar) o yo no seguir jugando. Pero mientras yo pueda (estar en el terreno), lo haré”, dijo la estrella venezolana, en la conferencia de prensa, después del segundo partido ante Cincinnati, de acuerdo con la Cadena FoxSports. “Me duele, pero es algo que puedo controlar. No voy a dejar al equipo, seguiré hasta donde llegue el equipo”.

Acuña fue inscrito en la lista de incapacitados el 15 de agosto, luego de estar inactivo tres días antes, debido a una inflamación en la articulación de la mano. Se perdió 10 encuentros.

Desde entonces había estado en observación. El 27 de septiembre, el último día de la ronda regular del equipo, fue sacado de la alineación por el manager Brian Snitker, tras sentir disconformidad.

Sin embargo, logró lidiar con su condición y como primer bate dejó un porcentaje de embasado de .326 y anotó 10 carreras, en los 10 desafíos que disputó a partir de la Serie Divisional, lapso en el que Atlanta dejó balance de 6-4.