Caracas.- Luis Contreras consiguió hacer realidad su sueño semanas atrás y todavía lo vive como si se tratase de un encuentro recién jugado. El pasado 23 de junio, culminó un viaje improbable hasta el montículo del Minute Maid Park.

El derecho completó el noveno inning en blanco del triunfo 8-1 contra los Orioles de Baltimore. Aunque Austin Hays le dio la bienvenida con un doble en línea por el jardín derecho, retiró en orden a Jorge Mateo, Ramón Urías y Colton Cowser.

“No sentí nervios. Mientras estaba en el bullpen, fue como tratar de tener la misma mentalidad que en los juegos de Triple A. De esa misma manera salí a pitchear. Después que saqué mi inning, las emociones afloraron. Porque lo había logrado”, señaló el derecho, uno de los 24 peloteros venezolanos que se han estrenado en las Grandes Ligas con 28 calendarios o más (28 años, 55 días).

El relevista llegó como agente libre a Houston, que le extendió un contrato de Ligas Menores, con invitación a los Entrenamientos de Primavera.

“Agradecido con todas las personas que me ayudaron a llegar hasta aquí”, apuntó Contreras, que fue bajado el 5 de julio al Sugar Land de la Liga de la Costa del Pacífico (Triple A), aunque sigue formando parte del roster de 40 sideral.

Como siempre, a lo largo de su trayectoria, Contreras ha tratado de sacarle provecho a cada experiencia y convertirla en una losa más en el camino amarillo hacia su transformación y superación personal.

“El consejo que me dieron (en Houston) fue tratar de simplificar, porque en ocasiones intentaba hacer de más. Ponía muchos pensamientos en mi cabeza que no debería estar allí. Ese ha sido el gran ajuste, la parte mental”, acotó el taponero en conversación con la LVBP.com.

 

Luis Contreras se estrenó con Houston, después de superar varias vicisitudes

 

UN VIAJE INESPERADO

Una semana antes de su estreno en las Grandes Ligas, Contreras recibió la llamada más importante de su carrera. No esperaba esa noticia, por lo que la alegría fue indescriptible, según sus palabras.

“Fue una experiencia inolvidable”, recordó. “El equipo (Space Cowboys) Triple A tenía agendado su encuentro para las 6:00 pm. Así que estaba en mi casa tranquilo y como a las 10:00 am, el mánager (Mickey Storey) me dice: ‘No te molestes en venir al estadio (Constellation Field), vete directamente al Minute Maid Park, porque te subimos’. Al trancar esa llamada, ya tenía un mensaje del director de viaje de los Astros y me dijo que después del juego salíamos de gira y podríamos llevar a la familia”.

Era domingo y los Astros jugaban a la 1:00 pm frente a los Tigres de Detroit. De Sugar Land, la ciudad más grande del Condado de Fort Bend (sede de la filial sideral, antesala a las Mayores), a Houston, apenas son unos 28 minutos en automóvil, pero el lanzador debía apresurarse.

“En ese momento, tuve que correr, vestirme, pasar por el estadio de Triple A, a buscar las cosas; mi bolso, todo, e irme directo al Minute Maid Park y mi esposa (Mari Mantilla), que fue la MVP de ese día, preparó maletas en dos minutos para estar en el debut… Llegué un poco apurado pero feliz”.

Houston necesitaba un brazo fresco en el bullpen y Contreras era una opción viable, luego que Nick Hernández regresara al Space Cowboys, después de transitar 3.2 entradas el sábado.

El novato criollo marchaba con récord de 1-0 y 1.40 de efectividad, con 20 ponches en 19.1 tramos.

“Lanza strike y puede darnos múltiples innings”, declaró el piloto Joe Espada sobre Contreras. “Va a estar siempre en la zona, atacando a los bateadores. Es un muchacho con una gran presencia (en el morrito). Estamos emocionados de tenerlo”.

Para hacerle un lugar en el roster de 40, Houston transfirió a Cristian Javier a la lista de incapacitados de 60 días.

Sólo que Contreras no fue usado. Al final del encuentro fue enviado de vuelta a Sugar Land. Debió tomar sus maletas sin desempacar y regresar a Ligas Menores.

“Cuando me bajaron, no fue lo esperado”, admitió. “A mucha gente le ha sucedido, pero no me lo esperaba. Aunque siempre he creído que todo pasa por algo y que los planes de Dios siempre son los correctos y traté de vivir el día a día. Así que debía esperar otra oportunidad”.

 

 

LA UNIVERSIDAD EN LUGAR DEL BEISBOL

Contreras, originario de Maracaibo, perdió el interés por el beisbol cuando apenas comenzaba su carrera profesional y se dedicó a estudiar.

“Acordé con los Cachorros de Chicago en 2015 (como agente libre internacional), ya era elegible después de hacer muchos tryouts. Desafortunadamente, poco menos de dos meses después de firmar, me lesioné del codo”, relató. “Primera vez que me pasaba. En República Dominicana me hicieron unos exámenes y me dijeron que tenía que ser operado. Así que me enviaron a casa (Venezuela) y luego me llamaron para dejarme en libertad… Entonces traté de buscar la manera de seguir adelante”.

El siguiente paso fue retomar lo que había dejado en el tintero.

“Antes de firmar, tenía un cupo en la Universidad del Zulia, en la Escuela de Nutrición. Al quedar libre traté de recuperar el cupo y empecé a estudiar hasta que por un tema de logística no pude seguir. Entonces comencé a hacer cursos relacionados con la misma área, certificaciones, enfocado en el deporte y luego di clases de ejercicios funcionales: Empecé a trabajar en un gimnasio como preparador físico. Añadiendo herramientas para seguir creciendo en esa profesión”.

Mientras se esforzaba para que otros no sufrieran lesiones practicando deportes, el beisbol volvió a alcanzarlo.

“Un amigo me dijo que estaba jugando en una de esas ligas dominicales, de adultos, y me invitó a pasar el rato. Tenía mucho tiempo sin lanzar pelotas, pero acepté. Resulta que el brazo no me molestó y seguí yendo todos los domingos. Noté que estaba lanzado duro y tirando strikes. Había algo. Quedamos campeones con un equipo que se llamaba Bulls”.

Por casualidad le midieron la velocidad y la recta le estaba caminando a 89 millas por hora, la velocidad que había llevado a Chicago a reclutarlo. Todavía quedaba algo en el tanque y sus condiciones físicas eran óptimas.

“Fue una motivación para prepararme un poco más en pitcheo”.

Era todo el empuje que necesitaba de vuelta a su verdadera pasión.

“Cuando se me da la oportunidad de venir a Estados Unidos, lo primero que hice fue buscar estudiar, pero como había sido profesional, no optaba a una beca universitaria. Entonces comencé a buscar otra liga de adultos con la intención de seguir haciendo lo que había iniciado en Venezuela, esta vez con la misión de aumentar millas y dedicarme más a la pelota, porque aquí hay varias ligas independientes”.

Su actuación no pasó inadvertida y consiguió una oportunidad, gracias a un veedor que le ayudó a realizar pruebas.

Resurgió en 2018 en la Empire Baseball League, un circuito veraniego de cinco equipos en el norte del estado de Nueva York. Lanzó para los campeones, Puerto Rican Islanders, registrando un balance de 3-1 y un promedio de 1.74 carreras limpias (11 CL/57.0 IP) en 11 juegos (siete aperturas).

Al año siguiente, pasó al Eastside Diamond Hoppers en la United Shore Professional Baseball League (USPBL). Impresionó con 39 ponches en 23.0 entradas en cinco juegos (cuatro aperturas).

 

Luis Contreras regresó al beisbol organizado con los Cerveceros de Milwaukee | Foto: USA TODAY Sports

Después de ese exitoso periplo, fue firmado por los Cerveceros el 19 de junio de 2019. En el sistema de los lupulosos pasó parte de cinco campañas (2019-2023), previo a llegar a la agencia libre durante la temporada baja, cuando fue captado por Houston.

La USPBL es una liga independiente con sede en Utica, Michigan, y desde su creación en 2016, ha graduado a 51 jugadores en las Ligas Menores, y seis de ellos han llegado a las Mayores. Además de Contreras, la lista incluye a Randy Wynne (Cincinnati), Joey Wiemer (Milwaukee), Jared Koenig (Oakland), Logan Gillaspie (Baltimore) y Randy Dobnak (Minnesota).

 

ARTISTA DEL PONCHE

Luis Contreras ha sido un artista del ponche en su paso por el sistema de granjas en MLB. Con Milwaukee (2019, 2021-2023) y Houston (2024) suma 277 abanicados en 194.2 innings, mientras que en Grandes Ligas logró seis guillotinados en igual número de entradas.

En la era de la velocidad, su recta de cuatro costuras promedió 91,8 millas por hora, de acuerdo con Baseball Savant, durante su estadía con los Astros.

“Cuando firmé con los Cerveceros me dijeron que mi mejor pitcheo era la recta, que posee ciertas características en cuanto a movimiento y la extensión del brazo al soltarla, lo que la hace difícil de batear, pese a que no es una recta potente”, glosó Contreras con perfecto léxico. “Mi pensamiento es tratar de ganarle al bateador y ponchar es parte de eso. Aunque pienso más en el proceso de llegar a ese out, sin pensar en el resultado. De lo que se trata es estar adelante en la cuenta y eso ayuda”.

Su recta –que es utilizada en el 46,7% de las veces- la mezcla con una slider (87,0 mph), curva (79,5 mph) y un cambio (85, 6 mph).

 

 

UN AMIGO EN LA CARRERA

Hay amigos que se convierten en familia. Luis Contreras y Pablo López, paisanos del Zulia, se conocieron en el beisbol menor de la región y desde entonces, su relación fraternal se ha consolidado.

“Pablo es un gran amigo y ejemplo a seguir, tanto dentro como fuera del terreno. Un gran ser humano. Lo conocí porque jugamos juntos de niños. Integramos muchas selecciones nacionales juntos. A pesar de no ser de la misma ciudad, ambos somos zulianos. Siempre coincidíamos y nuestros padres se hicieron muy amigos”, rememoró Contreras.

López, que ha sido el número uno en la rotación de los Mellizos de Minnesota en los últimos dos años, le invitó a entrenarse juntos previo al inicio de la zafra de 2024.

“Durante el receso entre temporadas entrenamos juntos en Miami, compartimos anécdotas y me ayudó muchísimo con el tema de cómo prepararme, los dos somos muy disciplinados. Más que amigos, somos familia”.

 

En su primera experiencia en las Mayores, Contreras transitó 6.0 innings en cinco apariciones | Foto: Houston Chronicle

 

EJEMPLO A SEGUIR

Dos de las grandes historias de 2024, entre la delegación criolla en las Grandes Ligas, están protagonizadas por Luis Contreras y, más recientemente, por Yilber Díaz, recluta de los D-backs de Arizona. Ambas son ejemplos de superación contra innumerables obstáculos.

“Mi clave ha sido la disciplina y resiliencia. Sin importar cuántas veces te caigas o se ponga difícil la situación, si tienes un sueño, no desmayes hasta conseguirlo. A menos que alguna lesión se interponga, mientras uno tenga salud, todo se puede lograr”, soltó Contreras.

“Mi familia y mi esposa han sido mi gran motor para seguir luchando y trabajando por lo que quiero. Siempre están conmigo sin importar lo que pase”.

 

Luis Contreras es reserva de Lara en la LVBP | Foto: Prensa Cardenales de Lara

 

EL DATO

Luis Contreras es reserva de Cardenales de Lara en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. La única vez que lanzó con los pájaros rojos se remonta a la temporada 2022-2023. “Las ganas de volver siempre están. Tuve una gran experiencia hace un par de años. Si la salud y mi estado físico me lo permiten al terminar la temporada, me encantaría volver y jugar de nuevo con Lara”.