Caracas.- En los cuatro primeros juegos que ha disputado La Guaira contra Caribes de Anzoátegui en la primera serie de los playoffs, los brazos escualos han otorgado hasta 33 boletos, a razón de casi uno por entrada. Algo que ha impactado de manera radical en el rendimiento del equipo, que ha visto esfumarse la ventaja de 2-0 que sacó como visitante en el inicio del careo en Puerto La Cruz.

El viernes, Anzoátegui fabricó ocho carreras en los dos primeros innings, con apenas tres hits, incluidos dos jonrones, luego que los pitchers escualos otorgaron cinco pasaportes, camino a una paliza de 16 por 2.

“En mi opinión lo que está ocurriendo es falta de confianza, cosa que me parece rara porque la serie está igualada y tenemos bastante público (en el parque)”, señaló Felipe Lira, coach de pitcheo. “Creo que nos falta salir con más coraje y dar lo mejor. Es muy diferente perder un juego cuando al pitcher le caen a palos a perderlo por tantas bases por bola”.

Contra los boletos no existe defensa posible y los tiradores litoralenses regalaron 14 esa noche. Un insólito descontrol, que en principio no tiene una razón lógica para Lira.

“Se están transformando totalmente al cruzar la raya, porque no es posible que en el bullpen lancen strikes y al cruzar la raya (para subir al montículo), hagan otra cosa totalmente distinta. Quizás la adrenalina, el público, el juego y querer hacer las cosas bien te hacen ponerte nervioso”, especuló el coach.

Una de las razones de tantos envíos fuera de la zona, podría tener su raíz en tratar de trabajar con excesivo cuidado a la peligrosa alineación de Caribes, que en la eliminatoria ligó para .277 y anotó 335 veces, la mayor cantidad entre los ocho equipos.

Pero hasta el viernes, los bates orientales no han estado particularmente incisivos. En sus primeros 140 turnos, Caribes ligó .257 de average, 20 puntos porcentuales menos que en la ronda regular. Aunque sí ha sabido ser oportuno. Con corredores en posición de anotar golpearon .289, algo que le ha ayudado a fabricar 30 carreras en la serie.

“Ahora estamos viendo a quien menos esperabas dando boletos. Lo que está pasado es algo que no había visto. El juego de ayer (viernes) fue uno de los peores y no por las 16 carreras, sino por la cantidad de anotaciones que se hicieron con tan pocos hits”, destacó Lira.

Aunado a esto, la rotación de los Tiburones tampoco han permitido darle descanso a los relevistas, que han transitado 24.2 episodios, contra los 11.1 de los iniciadores.

“Nuestros abridores no han pasado del tercer inning y es algo que impacta de manera negativa, porque tienes que usar el bullpen desde temprano. Es una serie corta y muchos lanzadores han pitchado en días seguidos, tal vez les toque hasta un tercer juego. Pero así es el beisbol. Uno tiene que tratar, de una u otra forma, de dar lo mejor con los lanzadores que tiene”, enfatizó.