Houston.- El miércoles de la semana pasada, previo al partido entre los Atléticos y los Astros en el Minute Maid Park, Franklin Barreto conversaba por teléfono con su compatriota y amigo, Gleyber Torres.
Mientras Barreto se preparaba para su cuarto juego a nivel de Grandes Ligas con Oakland, Torres se encontraba en plena recuperación de una cirugía Tommy John en el codo izquierdo.
Aunque Barreto lamentó lo sucedido con Torres, prospecto número uno de los Yanquis según MLBPipline.com, que se espera esté listo para los entrenamientos del 2018, el joven de los Atléticos, también prospecto número uno de su organización, está disfrutando sus primeros días en las Mayores.
“Primero que nada, contento con la oportunidad y de estar aquí en el mejor beisbol del mundo”, dijo Barreto, quien fue subido desde Triple A (Nashville) hace una semana por las lesiones de Marcus Semien y Chad Pinder. “Los primeros días (estuve) un poco nervioso, pero ya pasado mi primer turno, normal. El beisbol es beisbol en cualquier parte del mundo”.
Hasta ahora, esos primeros turnos han sido los mejores de Barreto vistiendo el uniforme de los Atléticos. En su segunda visita al plato a nivel de las Mayores el sábado pasado, le conectó cuadrangular a James Shields de los Medias Blancas. En total, el caraqueño dio cuatro hits en sus primeros dos encuentros con el equipo grande. Aunque no ha dado imparable desde entonces, lo importante ahora mismo es saborear un poco la vida de Grandes Ligas como torpedero del futuro de Oakland.
“Es bien talentoso; sabemos eso y que puede jugar ambas posiciones (del medio del cuadro)”, dijo acerca de Barreto el manager de los Atléticos, Bob Melvin. “Es uno de esos muchachos que les contagia su entusiasmo a los demás. Quieres que él sea parte de tu equipo”.
Barreto, quien llegó a la organización de los Atléticos desde los Azulejos en el cambio que llevó al estelar Josh Donaldson a Toronto a finales del 2014, bateaba .281/.326/.428 con Nashville a la hora de su ascenso. En la Liga del Cactus del 2016, disparó tres jonrones con el equipo grande de Oakland y, en el 2017, repitió con los Atléticos en pretemporada al batear .481/.500/.667 en 16 partidos.
“En el bateo, siempre he estado confiado”, afirmó Barreto. “Yo confío en mí y en lo que puedo hacer en el terreno”.
Con la habilidad de jugar tanto en el campo corto como la intermedia, Barreto perfila como un jugador fijo del equipo grande de los Atléticos más temprano que tarde. Pero cuando vuelva Semien, quien se encuentra rehabilitándose tras sufrir una fractura en la muñeca derecha hace dos meses y medio, lo más probable es que Barreto regrese a Nashville para pulirse más, sobre todo con el guante.
“Siempre estoy trabajando en mi defensa”, expresó el joven. “Creo que eso es uno de los (aspectos) que tengo que mejorar”.
“(Ha sido) una experiencia súper bonita. El solo hecho de estar aquí es un momento que nunca olvidaré. Pero seguiría trabajando para volver”.
Mientras tanto, la buena impresión que causó Barreto en las últimas dos pretemporadas se ha mantenido en esta primera experiencia en una campaña regular de Grandes Ligas.
“No le teme a ninguna situación, ningún escenario”, dijo Melvin. “Parece estar en medio de todo, así que ha hecho un buen trabajo para nosotros. Eso no me sorprende para nada”.
