Caracas.- Ender Inciarte está en medio de un inicio frío de temporada, pero el miércoles por la noche dio muestras de recuperar el ritmo con el que terminó la temporada anterior. Aunque lo hizo de una manera inusual, tras despachar dos cuadrangulares que le ayudaron a remolcar tres carreras en el triunfo de los Bravos de Atlanta, 5 por 4, contra los Marlins en Miami.

Inciarte llegó al partido con apenas cinco hits en 33 turnos (.152), con un extrabase (doble), pero aseguró que se mantuvo positivo, pese al mal momento con el madero.

“Terminé con un gran día solo porque tuve la actitud correcta”, dijo a MLB.com Inciarte, que antes de su demostración de fuerza solo sumaba 13 jonrones en 1.497 turnos en las Grandes Ligas.

El jardinero central, ganador del Guante de Oro, exhibió una línea ofensiva de .341/.396/.440 luego del receso del Juego de Estrellas de 2016, mientras que dejó un OPS de .835 OPS, tras consolidarse como abridor del lineup en sus 53 juegos con los Bravos, lapso en el que el equipo jugó para 29-24.

Antes de la reacción de Inciarte, los Bravos marchaban con balance de 1-6, el peor récord del Este en la Liga Nacional.

“Sé que estuvo tratando de hacer un buen swing”, destacó el manager Brian Snitker. “Sé que ha estado trabajando duro. Pasó toda la tarde en la jaula con Seitz (el coach de bateo Kevin Seitzer) tratando de arreglar algunas cosas y consiguió dos buenos pitcheos para batearlos”.

Inciarte sacudió sus estacazos en el tercer inning, con un corredor en circulación, contra Tom Koehler, y en el octavo, frente a Junichi Tazawa. Ambas conexiones salieron por encima de la pared del jardín derecho del Marlins Park.

El anterior partido de dos vuelacercas del bateador zurdo se remontaba al 27 de septiembre de 2015, cuando vestía el uniforme de los D-backs de Arizona.

“En ocasiones vas a tener juegos como este”, señaló Inciarte. “Es la segunda vez que consigo pegar dos jonrones en un juego y se siente realmente bien cuando lo logras. No lo voy a hacer muy a menudo, pero trato de no sorprenderme cuando ocurre”.

El marabino, de 26 años de edad, se convirtió en el sexto venezolano con un encuentro de al menos dos bambinazos con Atlanta. Los otros son Andrés Galarraga, que lo hizo nueve veces, Eduardo Pérez (4), Martín Prado (2), Omar Infante y Alex González, según el motor de búsqueda de Baseball Reference.